Mientras las movilizaciones se adelantaban tranquilas enmarcadas en el paro nacional, tanto en Medellín como en el oriente antioqueño, autoridades señalaron que se registraron disturbios en la noche del pasado sábado 8 de mayo, en el Urabá antioqueño.
En esa subregión han continuado los bloqueos de vías desde hace cuatro días, pero esta vez, algunos vándalos se trasladaron hasta el peaje de Cirilo entre Turbo y Necoclí, que pertenece al proyecto Mar 2 y que construye el consorcio Autopistas de Urabá, donde procedieron a quemar dos casetas y causar daños a todas las instalaciones.
De acuerdo con testigos, en las revueltas algunas personas se robaron equipos, una nevera y hasta partes de una de las casetas, posteriormente procedieron a prenderle fuego a lo que quedaba del peaje, por lo que fue necesaria la intervención del cuerpo de bomberos voluntarios, que poco pudieron hacer para sofocar las llamas.
Las autoridades indicaron que aún no se han identificado a los responsables y tampoco hubo capturas a pesar de que la Policía de Urabá y el Ejército llegaron al sitio para recuperar el control.
Según declaraciones del coronel Giovanni Puentes, comandante de la Policía de Urabá, la fuerza pública fue atacada mientras evacuaba a los empleados del peaje.
"Nuestros soldados defendieron y protegieron la vida de los empleados de la concesión y los lograron sacar a un sitio seguro para precisamente evitar que fueran agredidos y fueran lastimados en su integridad física", agregó el oficial.
Por su parte, el gobernador encargado de Antioquia, Luis Femando Suárez, señaló que la protesta es válida siempre y cuando sea pacífica "pero, obviamente, rechazamos los actos vandálicos que algunos pocos están cometiendo, afectando a las personas, afectando bienes públicos y privados".
Las autoridades están tras la búsqueda de los responsables, mientras que se evalúan los daños que sufrió el peaje del Urabá, por lo pronto se adelantan las adecuaciones para que este vuelva a operar.