La labor de Manuela Torres Gaviria en el mundo del café es el resultado del relevo generacional de una familia que lleva 70 años de historia en la producción del grano en el departamento del Quindío. A sus 13 años ha participado en competencias nacionales y regionales de barismo y conoce los detalles de las propiedades del café de la finca de sus padres y sus preparaciones.
Desde hace tres años conoció el método AeroPress. Desde entonces estudió a fondo cada detalle y ese camino la llevó a ganar la versión número seis del Campeonato Nacional de Aeropress que realizó la Federación Nacional de Cafeteros a principios de octubre. Este premio le dio un pase directo para que represente al país en la competencias de barismo en Vancouver, Canadá.
Manuela, oriunda del municipio de Montenegro, ganó el primer lugar entre 50 participantes en una competencia que puso a prueba sus conocimientos en este método de preparación de la bebida, que se basa en el uso de un dispositivo para preparar café inventado en 2005 por el estadounidense Alan Adler.
El campeonato se caracteriza por la rapidez y la agilidad y promueve el consumo de café 100% colombiano. En 5 minutos, los participantes debían demostrar a los jueces expertos por qué su bebida era la mejor.
Según Manuela, el AeroPress permite un café tan fuerte y concentrado como un expreso y tan delicado y sutil como un filtrado. Depende del barista la temperatura del agua, la cantidad, la molienda, los tiempos y el gramaje. Los jurados califican un buen balance, una taza dulce y que no se sienta el sabor amargo, además el profesionalismo del barista.
“El AeroPress es un método que yo siempre lo he comparado con una especie de jeringa, ya que consiste en un portafiltros en la parte de abajo, una cámara y un émbolo. Hay dos formas de preparar la bebida una de ellas es la tradicional donde se asegura el portafiltros en la cámara, se echa café, se vierte el agua y se hace presión con el émbolo”, explicó Manuela.
Estudio y dedicación por el café
Manuela es la menor de cuatro hermanos. Combina su pasión por el barismo y el café con sus estudios en el colegio. Cursa el grado octavo mientras se prepara para nuevas competencias y retos como el Campeonato Regional de Barismo Junior, Quindío que ganó este año.
Su mamá Luz Adriana Gaviria, asegura que la joven es la primera de clase, pese a los permisos que debe tramitar para estar en las competencias. Por ahora están en la gestión de los documentos que se necesitan para viajar a las finales de noviembre.
“Yo sabía que ella tenía talento, pero no pensé que los logros llegaran tan rápido. Estamos muy orgullosos de ella y la seguiremos apoyando en todo. Es el orgullo y la adoración de sus hermanos y siempre saca las mejores notas en el colegio”, dijo Luz Adriana.
Estudia catación de café y nuevas recetas de preparación. Con su entrenador Ronald Morales está dedicada a la memoria sensorial con la prueba de frutas y diferentes esencias como la vainilla y la canela. Su sueño es estudiar Negocios Internacionales y tener su propia exportadora de café.