La secretaria de Turismo de Providencia, Angely Castillo Vásquez señaló que es preocupante el panorama de los empresarios turísticos del municipio, ya que el destino continúa restringido para turistas por falta de infraestructura.
“Aún nos encontramos en proceso de reconstrucción y no tenemos suficiente capacidad instalada para recibir turismo, razón por la cual se encuentra actualmente restringido el ingreso de turistas y de personas no residentes al municipio”, explicó.
Por su parte, el líder raizal y empresario turístico de providencia, Raul Huffington calificó de ‘grave’ el hecho de que el destino continúe cerrado: “el turismo es la principal fuente de ingreso de la gran mayoría de las familias del municipio, necesitamos efectividad de las entidades encargadas de la reconstrucción”, aseguró.
Ana Hawkins propietaria de una posada nativa, señaló que, así como ellos, muchas familias con recursos propios han tenido que levantar sus casas y negocios, “luchando con mi esposo, mis dos hijos y las donaciones de unos turistas que nos habían visitado anteriormente, levantamos una placa para no seguir mojándonos, porque Fontur no nos cumplió y simplemente el Plan 100 del señor presidente no funcionó”, aseguró la damnificada.
Por su parte, los músicos que trabajan directamente con el turismo, aseguran que durante estos seis meses no han recibido una ayuda digna: “nosotros los músicos de Providencia y en general la cultura somos el gremio más afectado primeramente por el Covid y luego por el huracán Iota. No hemos tenido el apoyo del Gobierno para arrancar de nuevo”, señaló Johan Espinoza, músico providenciano.
“Yo también perdí mi casa, pero necesitamos trabajar y muchos artistas solo vivían de la música y trabajaban en hoteles o restaurantes y sin turismo nada funciona”, añadió Johan, quien además era maestro de la escuela de música de Providencia.
Los artistas y músicos de la isla, están a la espera de poner en marcha un compromiso pactado el pasado lunes 10 de mayo con el secretario de turismo del municipio Martin Valderrama, en el que se comprometía con la construcción de un espacio para presentaciones y la realización de un concierto virtual pago.
En la actualidad, algunas posadas nativas albergan al personal que trabaja en la reconstrucción del municipio que a la fecha se encuentra en la fase II.