José Miller Trujillo: medio siglo de música para el Huila y Colombia
Reconocido por 'Retumban las tamboras', bambuco que identifica al Huila y sus fiestas tradicionales, es apenas una de las casi 200 canciones del compositor.
Foto: cortesía/ Junto a Jorge Villamil, de quien recibió en 1979 el primer premio por su composición “Retumban las tamboras”.
Rafael Trujillo
Aunque su gusto por el arte y, en especial, la música, comenzó cuando aún estaba en el colegio, para José Miller Trujillo el punto de partida definitivo de su carrera ocurrió el 18 de junio de 1972: tenía entonces 24 años, acababa de grabarse y comenzó a sonar en todas las emisoras de Neiva el sonido pegajoso de una canción que le abriría un camino más allá de las fronteras locales y nacionales, y lo convertiría en una de las figuras esenciales de las festividades sampedrinas.
Aquella canción fue “¡Que vivan San Pedro y San Juan!”, grabada en Bogotá por el dueto cómico-musical Emeterio y Felipe, “Los Tolimenses”. Su presentación en público se dio en medio de la algarabía de las festividades sampedrinas en la capital del Huila y lanzó al joven compositor a una carrera de letras y música en los más variados ritmos.
Sin embargo, dentro y fuera de su tierra, el nombre de José Miller Trujillo parece haber quedado asociado a otra canción que se ha erigido como uno de los himnos que más suenan en el Festival del Bambuco en el Huila, y que ha sido, además, uno de los que cuenta con más versiones: “Retumban las tamboras”.
“Antes de todo eso yo organizaba en el colegio eventos con danzas, canto, zarzuela y teatro”, recuerda el compositor con una alegre añoranza. Trujillo estudió en el Salesiano, una de las instituciones más reconocidas de su Neiva natal.
“Retumban las tamboras” es un bambuco sanjuanero cuya inspiración musical surgió cuando iba por una de las calles del centro de Neiva. Por ahí fue saliendo la tonada y luego llegó todo. No supe por dónde caminé después porque fue como una especie de trance”, recuerda el compositor.
Aunque lo compuso en 1977, sometió a “Retumban las tamboras” a varios ajustes y ganó en 1979 el primer lugar en el Concurso Nacional de Composición Musical en Neiva. El bambuco ha llegado a unos 30 países en los cinco continentes, y le ha merecido múltiples reconocimientos, incluidas las máximas exaltaciones que brindan las autoridades de Neiva y el Huila por su aporte a la cultura y el folclor del Alto Magdalena.
“Pero yo no solo soy ese hermoso tema. Antes de eso ‘Los ocho de Colombia’ -una orquesta de música tropical de gran trayectoria- me había grabado tres canciones: ‘Compadre Ely’, ‘Color de cumbia’, y ‘El mono Paternina’”, indica el compositor.
En su haber cuenta con unas 200 composiciones, aunque considera que sigue puliendo a varias de ellas, en tanto ha desechado algunas para retomar apartes de las letras o de la música. Y si bien una porción corresponde a temas tropicales, también otra importante es de música de aires andinos, junto a temas románticos y hasta con expresiones de dolor.
José Miller Trujillo sigue hoy tan activo como al inicio de su carrera artística. Compone, arregla, e incluso interpreta sus composiciones, y no piensa en un retiro, mientras se oye de fondo alguna versión de uno de sus temas.
“En cada obra que uno hace hay que poner una buena dosis de amor y de alegría. Me gustaría que me recuerden siempre con mucha alegría, que ha hecho reír a la gente, que la ha hecho bailar y que incluso los puso a pensar”, señala el compositor.