Tras recibir recientemente amenazas a causa de la disputa territorial entre grupos de disidencias de las Farc, alrededor de 60 familias de firmantes de paz abandonaron hoy forzosamente el Espacio Territorial de Capacitación y Reincorporación, ETCR, de Miravalle, ubicado en San Vicente del Caguán, Caquetá, y se desplazaron hasta el municipio de El Doncello, ubicado al norte del mismo departamento.
Las familias firmantes se instalarán provisionalmente en ese municipio, mientras se avanza en la compra de un predio para que puedan continuar con sus proyectos de vida.
La caravana humanitaria es acompañada por entidades, instituciones y organizaciones como el Ministerio del Interior, la Misión de la ONU en Colombia, la MAP-OEA, la Agencia de Reincorporación y Normalización, la Agencia de Renovación del Territorio y la Defensoría del Pueblo, así como las autoridades locales.
Según la ARN, para el traslado se tuvieron en 80 personas aproximadamente, 65 animales o mascotas, 1500 muebles y enseres. Asimismo, se registró el traslado de un proyecto colectivo, 8 proyectos individuales y 3 iniciativas de paz.
Voces de firmantes
A su salida, Hermides Linares, firmante de paz y vocero de la comunidad del ETCR de Miravalle, señaló que ante esta situación los retos dependen más que todo de las instituciones del Gobierno nacional, “nosotros tenemos todas las condiciones para apoyar, aportar a este proceso, es el gobierno el que debe garantizarnos el tema de tierras, viviendas, la reubicación inmediata, para nosotros poder trabajar y mirar que proyectos se pueden adelantar en el sitio donde vamos a estar”.
Asimismo, Federico Montes, firmante de paz, delegado del Comité de Seguimiento, Impulso y Verificación a la Implementación, CSIVI, por el componente Comunes, aseguró que “esperamos que esta experiencia no se vuelva a repetir en ninguna de las regiones y que la paz total pueda fortalecer mecanismos de seguridad de garantías para la población, para la comunidad firmante y los territorios, y de esta manera crear el mejor ambiente para la construcción de paz en Colombia”.
Los compromisos
Tania Rodríguez, directora programática de la Agencia de Reincorporación, dio a conocer que los y las firmantes de paz del ETCR Miravalle vivirán temporalmente en un predio arrendado por 12 meses llamado Rancho Grande en el municipio de El Doncello, el cual cuenta con 16 soluciones habitacionales de emergencia, indicando que la Agencia se compromete a realizar el pago por concepto de servicios públicos y que cada unidad habitacional contará con una ducha y un baño portátil.
En relación con el traslado de proyectos productivo dijo que la ARN avanzará en el contrato de arrendamiento de una bodega en el casco urbano de El Doncello, para el traslado de una parte de los proyectos, especialmente Crafepaz de mujeres reincorporadas.
En el caso de los otros dos proyectos bandera del ETCR de Miravalle, es decir, la empresa de turismo Caguán Expedición y el Equipo de rafting Remando por la paz, afirmó que la Agencia de Reincorporación está buscando un local en San Vicente del Caguán.
Por su parte, la ANT continúa en la negociación para la compra de un predio ubicado en la vereda La Granada de El Doncello, donde se espera trasladar de manera definitiva, y a más tardar en un año, a estas familias desplazadas.
Amenazas y despedida
Cabe recordar que el 21 de junio la comunidad firmante de Miravalle recibió un ultimátum por parte de un grupo armado ilegal que les exigía dejar el territorio donde adelantaban sus procesos productivos ligados a actividades como el procesamiento del café y los deportes extremos.
Dos días después de la amenaza, la Agencia de Turismo ‘Caguán Expeditions’ y el equipo de rafting 'Remando por la Paz' anunciaron que se veían “obligados” a salir de su territorio, pues quedaron “en medio de una absurda disputa”, viéndose afectada la transformación del territorio y construcción de la paz.