"Rechazamos el tráfico de fauna en el país y los hechos que investigan la Policía donde dos hembras de ocelote o tigrillo, dos machos de cernícalos americanos, y dos machos de faisanes dorados, fueron hurtados del Bioparque Guátika en (el municipio de) Tibasosa, Boyacá", afirmó la ministra de Ambiente, Susana Muhamad, citada en un comunicado de su despacho.
Tras el robo, la Dirección de Carabineros y Protección Animal (DICAR) está investigando estos hechos y las autoridades ofrecieron una recompensa de 20 millones de pesos (unos 5.000 dólares) por información que permita detener a los responsables.
"Desde el Sistema Nacional Ambiental y en un trabajo articulado con las autoridades, estamos haciendo un seguimiento a estos hechos y esperamos su colaboración para ubicar no sólo estas especies, sino a la fauna silvestre que está siendo comercializada de manera ilegal", declaró la ministra.
En Colombia, el tráfico de fauna y especies silvestres está penalizado y quienes cometan este delito pueden recibir penas de hasta 12 años de prisión.