Muchos fueron los turistas que se vieron obligados a permanecer en la isla de San Andrés, debido a la suspensión de operaciones del aeropuerto internacional Gustavo Rojas Pinilla de la isla de San Andrés por el paso del huracán Julia.
La incertidumbre de poder averiguar si sus vuelos estaban o no activos fue lo que llevó a muchos turistas a acercarse a las oficinas de las aerolíneas que operan en el territorio insular desde y hacia la isla para resolver sus inquietudes.
Para José González, esta se convierte en una experiencia que antes no había vivido y que, pese a las circunstancias, considera que tuvo un buen momento disfrutando de sus vacaciones en la isla.
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“Es algo que se nos sale de las manos, pero no puedo quejarme, estuve en la isla y disfrutamos el viaje, pasamos bien sabroso y espero volver cuando no haya otra tormenta como la que tuvieron”, dijo entre risas el turista bogotano quien estuvo acompañado de su esposa y dos hijos.
Por otro lado, el venezolano residente en Pereira, Pelusa Ramírez, estuvo en la incertidumbre de saber si su vuelo se había cancelado o si finalmente podía volver a su lugar de origen.
“Por un lado nos decían que nos habían cancelado mientras que por otro lado no nos sabían decir su el vuelo salía o no, la otra cosa era que no nos sabían decir quien se encargaba de pagar los días adicionales de hotel que nos tocaba vivir porque nadie nos decía nada”, afirma el turista que finalmente resolvió su inquietud luego de haber sido atendido.
Por orden presidencial, los hoteles estaban habilitados para poder recibir a quienes lo necesitaran como refugios, incluyendo residentes y turistas, tema que pudieron resolver los turistas nacionales y extranjeros que debieron quedarse en la isla de San Andrés por la emergencia.