Las medias maratones, un recorrido por su historia
En un mundo de inmovilidad atada a un celular y remediada por los gimnasios, el correr, ejercicio natural para los antiguos, vuelve por sus fueros en los cuerpos de los que se preocupan por su salud y quieren disfrutar del olor de de la naturaleza con su aire puro, el cantar de los pájaros y es objeto de competencias en los certámenes deportivos nacionales e internacionales.
El origen de la maratón en los Juegos Olímpicos y otros eventos deportivos se remonta a la batalla de Maratón, ciudad griega, que vio el enfrentamiento de griegos y persas, en la primera de las Guerras Médicas, en el año 409 a.c. La leyenda dice que Filipides, probablemente un soldado griego, fue enviado de Maratón hasta Atenas para dar la noticia de la victoria griega. Corrió 40 kilómetros, logró su cometido, pero murió al instante. En conmemoración de este acontecimiento, las maratones entran al escenario en los Juegos Olímpicos de Atenas en 1896, para los hombres y casi cien años después, en 1984, para las mujeres en la ciudad de Los Ángeles. Pero hay que recordar que, en los tiempos antiguos, en el siglo XV, también se destacaron los chasquis, correos humanos que llevaban noticias para el emperador Inca, recorriendo en carreras de relevos la inmensidad del imperio Inca (tres millones de kilómetros cuadrados que hoy ocupan Bolivia, Perú, el norte de Chile, el noreste de Argentina, Ecuador y el sur de Colombia.)
En 1908, por decisión de la reina de Inglaterra que quería presenciar, sin desplazarse, la maratón en el castillo de Windsor se tuvo que aumentar el recorrido de 40 a 42,195 kilómetros.
Maratones curiosas son muchas, como la de la Gran Muralla China en 1999, con 5.164 gradas o la corrida brasileña, de Río de Janeiro y San Pablo, de 15 kilómetros por las ciudades, con 30.000 participantes, que va acompañada de una fiesta folclórica; o la maratón de la arena, en 1984, de 240 kilómetros en seis días en el desierto de Marruecos, donde los corredores deben enfrentar dunas y tempestades de arena o la del Polo Norte en Groenlandia donde los participantes deben soportar una temperatura de 41 grados y vientos polares. También es célebre la maratón de Nueva York, con 45.000 participantes.
Desde 1992 la Asociación Internacional de Federaciones de Atletismo organiza el Campeonato mundial de media maratón. A partir de ese momento en todos los países del mundo se realizan medias maratones, siendo los atletas kenianos los más veloces.
En Colombia, ya son tradicionales las maratones. La media maratón de Bogotá, 21 kilómetros (o el recorrido recreativo de 10 km), en terreno llano, ascensos y descensos, es una carrera muy apetecida, que se desarrolla entre el 25 de julio y el 8 de agosto. Con unos 2.000 participantes, generalmente sale de la Plaza de Eventos del Parque Simón Bolívar, recorre barrios del Occidente y del Norte de la ciudad para llegar otra vez al Parque Simón Bolívar. Los participantes, entre los que habitualmente hay corredores de más de 40 países, reciben un acompañamiento multidisciplinar previo.
El objetivo es que, además del encuentro en un entorno natural, no olvidemos los beneficios de correr: ayuda a perder peso, manteniendo la masa muscular, fortalece el sistema cardiopulmonar, el sistema óseo, controla el colesterol, la diabetes y la hipertensión y es el mejor antidepresivo.
¡A correr!
