El Meta es uno de los departamentos con mayor producción nacional de guayaba. Las fincas, que tienen en promedio una extensión de ocho hectáreas, producen alrededor de 36.000 kilos de este producto por año.
Por eso, más de 40 familias agricultoras de Fuentedeoro (Meta) aprovechan los excedentes de producción de sus cultivos de guayaba para la elaboración de vino, haciendo su aporte a la reducción de la cifra de pérdidas de este alimento, al tiempo buscan atender la demanda del mercado.
Según Nielsen (líder mundial en medición de audiencias, datos y análisis), solo en Colombia se consumen 43 millones de botellas de vino al año, representando 330 millones de dólares en ventas.
Esta importante apuesta hace parte de las acciones que, a la fecha, la Región Administrativa y de Planificación Especial (RAP-E) Región Central y la Corporación Colombiana de Investigación Agropecuaria (Agrosavia) adelantan con el propósito de reducir las pérdidas poscosecha de alimentos en el departamento del Meta.
“Estamos trabajando participativamente con la Asociación de Mujeres Productoras y Transformadoras de Productos Agrícolas (Asomupro de Oro) y la Asociación de Productores Agrícolas y Pecuarios de Alto y Bajo Sardinata (Agrosardi), especialmente con productos como la guayaba y el plátano”, señaló Jorge Eduardo Aya Rodríguez, responsable del eje de Infraestructura de Transporte, Logística y Servicios Públicos de la RAP-E.
Asimismo, el vocero de la RAP-E, resalta la apuesta del vino de guayaba que están desarrollando con todos los estándares de calidad, en el que utilizan los excedentes de la fruta para fermentarla y de esta manera lograr una inclusión en el mercado de los licores.
Actualmente, las integrantes de Asomupro de Oro también producen dulces y jalea de guayaba:
“Nos encontramos a puertas de certificarnos con el Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (Invima) con nuestro vino de guayaba mejorando con calidad y sostenibilidad. Hemos tenido toda la asistencia técnica en los procesos de transformación, capacitaciones, difusión y acompañamiento en las diferentes etapas que implica la vinculación a cadenas de valor. Ese apoyo ha sido vital para nuestro crecimiento comercial a nivel regional, nacional e internacional”, expresó Sandra Milena Montoya, representante legal de la asociación.
Avanza la caracterización del plátano
Una de las causas de las pérdidas de alimentos es el desconocimiento de sus aptitudes culinarias o para su transformación. En el caso del plátano se desconoce las diferentes variedades y las formas de preparación existentes, esto hace que sean despreciadas por los consumidores conllevando a altas pérdidas y desperdicios de la fruta.
En el mismo sentido, con el acondicionamiento y la tecnificación de la agricultura, se busca aumentar la eficiencia productiva, mejorar la calidad de los productos y su competitividad en el mercado, acciones que aportan a la reducción de pérdidas y desperdicios de alimentos en la Región Central integrada por Bogotá D.C., Boyacá, Cundinamarca, Huila, Meta y Tolima.
“Para el caso del plátano, se están caracterizando las diferentes variedades que produce el departamento del Meta, determinando sus características nutricionales y fisicoquímicas y los minerales que contienen donde nos permite identificar para promover su consumo y valorización. Algunas de las preparaciones que se pueden hacer con este nutritivo producto son: patacones, chips, puré, tortas, entre otros”, señala María Cristina García Muñoz, investigadora PhD de Agrosavia.
Para finalizar el representante de RAP-E, Jorge Eduardo Aya Rodríguez, afirma que: “la participación de la mujer es fundamental aquí en el Meta. Nos han enseñado y nos ha mostrado, que si uno tiene ganas, si tiene orden, si tiene constancia, puede llegar a desarrollar y sacar adelante una situación que sea útil productiva y benéfica para todo el hogar y toda la familia del departamento”.