La Corte Suprema de Justicia ratificó el fallo de primera instancia emitido en 2017 por el juzgado penal de Cúcuta, en donde se declaró culpable al exconcejal de Cúcuta, Julio César Vélez González por el asesinato de su esposa, María Claudia Castaño.
Lo anterior, luego de que el político buscara tumbar la condena que había dictado el juzgado y pidió la casación, al considerar que la muerte de la mujer se la habría causado ella misma y que el hecho se trató de un suicidio. Según él, en medio de una discusión, ella misma habría tomado un arma de fuego y se disparó.
La Corte, no obstante, tuvo en cuenta las consideraciones del Tribunal, que determinó que había cuestionamientos serios e irregularidades en la escena del crimen.
La jurisprudencia no aceptó el recurso y ratificó la condena por 450 meses de prisión en contra del exconcejal, por el delito de homicidio agravado, que se suman a una inhabilidad para ejercer cargos públicos de 20 años.
El 16 de noviembre de 2009, Vélez González y Castaño Avendaño se casaron, se habían conocido en la universidad. Establecieron su vivienda en la casa familiar del concejal, donde vivían los padres y la familia extendida, en el barrio Quinta Oriental, en Cúcuta.
Cuatro días después de su quinto mes de casados, según el recurso de casación de 2018 de la Corte Suprema de Justicia, ambos se encontraban en un hall frente a la alcoba matrimonial y sobre las 6:00 de la tarde, se escuchó un disparo que se incrustó en la cabeza de la mujer, disparado por un revólver marca Cassidy, calibre 38, que conservaba cinco tiros más.
Vélez González bajó a los pisos inferiores de la vivienda y le dijo a su tía y a la empleada doméstica que su esposa se había disparado en la cabeza. Un cuñado médico llegó a la vivienda y aseguró que continuaba con vida y solicitaron una ambulancia para trasladar a la mujer a un hospital, pero allí falleció.