Luego de terminar su competencia en los 400 metros, conquistando la primera medalla para Colombia en el atletismo de Tokio, Anthony Zambrano reveló detalles que no se conocían sobre su proceso previo a su primera final olímpica.
El atleta, barranquillero de corazón y guajiro de nacimiento, reconoció que presentaba dolencias musculares durante los días previos a la ronda clasificatoria, que estuvieron a punto de sacarlo de competencia.
“Este año para mí fue lo peor. Pensé en dejar los Juegos Olímpicos a un lado porque he tenido muchas lesiones. Dos días antes de la clasificación tenía un dolor muy fuerte en el cuádriceps y mi entrenador me dijo que saliera a correr, que dejáramos todo en manos de Dios”, declaró el atleta.
Visiblemente emocionado y con la espontaneidad que lo caracteriza, Anthony destacó el amor por su madre y por Colombia.
“Amo a mi país, amo a mi deporte y amo a mi madre, expresó Anthony.
Mostrando un mensaje escrito en el dorsal del número de competencia que utilizó en la pista, expresó que la medalla de plata que ganó es un regalo de cumpleaños para su madre Miladis Zambrano.
“Este es el regalo de cumpleaños para mi mamá, se lo prometí. Le dije que le quería dar una medalla olímpica y todo lo que le prometo a mi mamá lo logró. Todo lo hago por ella, porque la amo mucho”, dijo al final de la prueba.
El atleta agregó que “es un orgullo representar a mi país, representar a mi departamento. Amo mucho a Barranquilla, aunque nací en Maicao. Esto es una alegría que le doy a mi país, a la nueva generación del atletismo colombiano. Si se puede salir adelante cuando se tiene disciplina y se tiene dedicación”.
Zambrano no se declaró satisfecho y sentenció que va por más en su carrera.
“Yo vine a esta vida a darle éxitos a mi país. A quitar todos los mitos, todos los récords de mi país. Primera vez en la historia que corre 43 segundos, primera vez que son subcampeones olímpicos, muchas cosas que he venido batiendo de mi país y lo que seguirá viniendo”, aseguró.
En el diálogo con Caracol Sports, Anthony expresó que “le doy gracias a Dios. Le pido que me de lo que me merezco, ni más ni menos”. Ahora se prepara para competir en la prueba de los relevos 4x400, al lado de Alejandro Perlaza, Diego Palomeque y Jhon Solís.