Hace cinco años Colombia tomó una decisión histórica al apostarle a la paz, en este tiempo se han presentado avances y retos, sin embargo, para lograr la implementación del acuerdo aún hay una serie de obstáculos que, como el exdefensor del Pueblo, Carlos Negret resaltó, requieren de un consenso político, combatir la droga, desmantelar las organizaciones criminales y defender a los excombatientes y los líderes sociales que se han vuelto víctimas de la delincuencia y las Disidencias.
Para Negret, tanto las víctimas como los excombatientes y la sociedad requieren más garantías, se necesita que no disminuya el apoyo de los firmantes de paz al acuerdo, que actualmente está en el 90%, pues, aunque zonas del país como Montes de María, algunos municipios de Arauca y Antioquia van por buen camino en la implementación del acuerdo, hay otras zonas en estado crítico.
“Estamos realmente atrasados en el Pacífico caucano, donde hay problemas de seguridad, donde habiendo municipios del Programa de Desarrollo con Enfoque Territorial, PDET, no hay proyectos en ejecución. En Norte de Santander, por el Eln, Epl, Disidencias de las Farc y aunado a estos grupos, tenemos el fenómeno migratorio y un trabajo de erradicación forzado por parte de las fuerzas militares”, explicó.
Este es uno de los problemas que ve el expresidente de la Corte Constitucional, José Gregorio Hernández Galindo, y es que tanto el Gobierno como las Farc no han cumplido todo lo acordado, y se acerca un nuevo Gobierno.
“Lo que hay que hacer es retirar todo proyecto de supresión de la JEP, colaborar con ella y permitir que cumpla sus funciones (…) Es muy importante que entendamos todos que la paz y la reconciliación son objetivos de interés común, ocupémonos mejor en otros temas nuevos mientras conseguimos la paz, como temas en materia económica, la igualdad, que no haya más colombianos que padezcan la pobreza, el hambre”, dijo.
Pero no solo se trata de cumplir lo acordado, según el presidente de la JEP, Eduardo Cifuentes, también es mejorar el papel del Estado en todo el país para evitar repetir viejos errores.
“Yo creo que esto tiene que comprometer a la sociedad como un todo, sin duda alguna comenzando con el propio Estado, cuyas ausencias e ineficacias tienen mucho que ver con los delitos cometidos en el pasado”, aseveró.
Y más allá de estos retos, para el exdefensor del Pueblo, Colombia debe continuar el acuerdo con las Farc y tender los puentes para conversar con el Eln y otros grupos ilegales que le quitan la tranquilidad a las comunidades que ya atraviesan por situaciones complejas.
Los expertos recalcan que la paz es un derecho y un deber, por lo que se debe actuar con buena fe y buscar la tranquilidad que Colombia siempre ha anhelado, y así poder ocuparse de otros temas que el país tiene pendientes y que la guerra ha ocultado.