Sigifredo López, un testimonio 20 años después del secuestro de los diputados del Valle
Con una eucaristía en la iglesia de San Francisco y un acto simbólico, familiares y amigos de los diputados asesinados por las Farc les rindieron un homenaje.
Con una eucaristía en la iglesia de San Francisco y un acto simbólico, familiares y amigos de los diputados asesinados por las Farc les rindieron un homenaje.
Hace 20 años, 12 diputados del Valle del Cauca fueron sacados de la Asamblea Departamental, ubicada en pleno centro de Cali, por guerrilleros de las antiguas Farc que se hicieron pasar por militares que realizaban un operativo por una supuesta amenaza de bomba en el edificio.
Después de llevarlos en una buseta blanca, Alias JJ les informó a los 17 ocupantes (entre diputados y asistentes) que estaban secuestrados. Trágicamente, el 18 de junio de 2007, 11 de ellos fueron asesinados.
Veinte años después, Sigifredo López, único diputado sobreviviente, recuerda la hermandad con la que vivió esos cinco años de secuestro junto a sus compañeros.
“Conversábamos sobre literatura, filosofía, política, los cambios que debería tener el país y nuestras familias, sobre esos temas giraron las conversaciones durante cinco años de cautiverio”, recordó.
Para López, recordar lo acontecido ese 11 de abril del 2002 es doloroso, pero entiende “que se debe realizar un ejercicio de memoria para conmemorar estos hechos tan duros, con el propósito que no se vuelvan a repetir”.
Aunque siempre ha hablado de perdón y reconciliación, e incluso luego de apoyar el acuerdo de paz con las Farc, piensa que “también ha habido impunidad y el acuerdo ha tenido muchas falencias y no se han cumplido con los compromisos de verdad plena, reparación de las víctimas y la no repetición de hechos victimizantes. Aunque es preferible, un acuerdo de Paz con deficiencias y no seguir el mismo círculo vicioso de violencia”.
Fabiola Perdomo, esposa del diputado Juan Carlos Narváez, también habló sobre su proceso de reconciliación con las Farc.
“Pude entrevistarme con quien lideró el secuestro, conocí la planeación y la verdad de lo que ocurrió ese día, resolví preguntas y aunque duele mucho tener al frente a quiénes dieron la orden de asesinarlos, la verdad por muy dura que sea es necesaria”, señaló.
Por su parte, Gustavo Arbeláez, antiguo comandante del frente Manuel Cepeda y uno de los autores del secuestro, tras varios años de haberse desmovilizado, hoy trabaja como líder de derechos humanos y reconoce que lo ocurrido fue un grave error.
“Con el paso de los años hemos concluido que fue un error político muy grande de haber recurrido a esa medida tan fuerte, que costó la vida de personas muy prestantes para el departamento por la labor que estaban desarrollando”, admitió Arbeláez, quien asume el costo político de ese hecho que “no debió pasar”.
El próximo 18 de junio se cumplen 15 años del asesinato de los 11 diputados que estuvieron cinco años en cautiverio.