La Junta Médica Nacional, conformada por organizaciones médicas de carácter gremial, científico y académico de Colombia, se pronunció frente al episodio que involucró al presidente Gustavo Petro y a su hermano en torno al síndrome de Asperger.
“Frente a las noticias recientes sobre la salud mental del presidente de la República, Gustavo Petro Urrego, la Junta Médica Nacional se pronuncia y hace hincapié en la imperiosa necesidad de abordar este asunto desde una perspectiva ética y responsable”, afirmó la Junta.
Las organizaciones llamaron la atención sobre lo que significa divulgar información imprecisa y superficial respecto de una posible condición, y de cómo ese tratamiento mediático afecta no solo a quien lo padece, sino a los profesionales dedicados a la salud mental.
“Subrayamos la importancia de transmitir con rigurosidad información relacionada con temas de salud mental, con el fin de prevenir la estigmatización y desmentir creencias erróneas o malintencionadas”.
Cuando Juan Fernando Petro habló de la supuesta condición del Jefe de Estado, Colprensa consultó al profesor titular de Neurología de la Universidad del Rosario e investigador en Neurociencia, Leonardo Palacios, quien explicó que a diferencia de una enfermedad como el sida o el COVID-19, este trastorno del espectro autista no se detecta ni con una prueba de laboratorio ni con imágenes del cerebro.
“Desde la perspectiva médica, es necesario enfatizar que los diagnósticos no son simples opiniones. Emitirlos requiere de un proceso metódico que abarca la recopilación sistemática, el examen clínico o riguroso, las evaluaciones pormenorizadas y la aplicación de técnicas respaldadas por la evidencia científica”, precisó la Junta.
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Juan Fernando Petro afirmó en el programa “Los Informantes” que tanto él como su hermano estaban diagnosticados desde jóvenes con el trastorno del espectro autista (TEA).
“Podemos estar con 10 mil personas, pero de repente no estamos ahí. (…) Él habita su propio universo, que está en su cabeza, y a veces el mundo no existe allá afuera”, subrayó.
El Presidente desmintió tal afirmación, pero el revuelo no se detuvo allí, pues motivó una discusión, a propósito de las ausencias del mandatario, como argumento.
Luego del escándalo, Juan Fernando Petro insistió en que la entrevista no se pasó en su totalidad y carecía de contexto.