Socorro Oliveros nació hace 71 años en Bucaramanga en una numerosa familia, en la cual es la tercera hija de nueve hermanos. Es la esposa del candidato presidencial por la Liga de Gobernantes Anticorrupción, Rodolfo Hernández, desde hace poco más de 50 años. Juntos tienen cuatro hijos, dos adoptados y dos biológicos, y actualmente tienen dos nietos.
La bumanguesa es diseñadora de interiores y desde hace 25 años es la gerente administrativa de la empresa de la familia “HG Constructora”, que tiene más de 50 años de tradición. Socorro ha procurado mantenerse alejada del ojo público en 2016, cuando Hernández llegó a la Alcaldía de Bucaramanga, fueron escasas sus apariciones pues no quería que se relacionaran las actividades del cargo de su esposo con la compañía. Así mismo, admitió que prefería que la reconocieran como ama de casa o esposa del alcalde y no con el título de “primera dama”.
Dentro de sus cualidades destaca ser cautelosa, organizada y cuidadosa con el dinero. Sin embargo, aseveró en una entrevista para un medio nacional que Hernández nunca la ha felicitado por su labor, pero que sabe que cuando le preguntan al respecto el dice que “desde que le solté la empresa en manos de mi familia está mejor”.
A diferencia de la campaña para la Alcaldía, Oliveros en esta ocasión decidió trabajar como miembro activo, por eso actualmente es la gerente de campaña del candidato y desde la sede de campaña situada en Bucaramanga, a la que llamaron “Casa Nariño”, hace seguimiento a la estrategia del candidato, y dejó claro desde el inicio que no tiene intenciones de irse a vivir a Bogotá si el candidato resulta ganador, sino que, por el contrario, preferiría seguir viviendo en su casa en Bucaramanga.
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El plan de Oliveros si llega a ser primera dama
En una entrevista para el diario El Heraldo, Socorro expresó que en caso de que su esposo quedara presidente, lo primero que haría sería darle un giro completo a la figura de primera dama, que para ella es considerado como “poco productivo”, y explicó que crearía una oficina para la primera dama destinada a brindar apoyo al primer mandatario durante su gobierno.
Aunque la ruta no está completamente definida, Oliveros se interesa por los temas de género y por esto quiere impulsar un programa relacionado con la maternidad y el apoyo al empleo de las mujeres en condición de pobreza.
“Si Rodolfo llega a ser presidente, en mí van a tener la bandera más grande de la vida, van a encontrar todo el apoyo que esté a mi alcance, ustedes van a ser mi bandera”, dijo refiriéndose a las mujeres presentes durante un encuentro que organizó a inicio de año, antes de las elecciones legislativas del 13 de marzo.
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