Jóvenes del Meta le apuestan a la paz y reconciliación con el 'Festival de Cine Subregional Güejari'
Los jóvenes del sur del Meta alzan su voz en contra de la estigmatización, exclusión y dicen sí a la paz, a través de la primera edición del 'Festival de Cine Subregional Güejari'.
Con el ánimo y los sueños de vivir en zonas tranquilas donde el conflicto sea solo un tema de historia y estudio para las nuevas generaciones, jóvenes de los municipios de Puerto Lleras, Puerto Rico, Puerto Concordia, Mesetas y Vistahermosa, en Meta, realizaron la primera edición del 'Festival de Cine Subregional Güejari'.
El nombre del festival es la unión de los ríos Güejar y Ariari, que se unen metros abajo de la cabecera municipal de Puerto Rico, municipio donde se realizó el evento.
Contó con la participación de más de 80 jóvenes amantes de la cultura y la paz, así lo manifestó Alejandro Uchima, del colectivo Films La Herradura y líder de jóvenes de Puerto Concordia, quien agregó que el evento fue todo un éxito.
“Participamos porque creemos que es algo muy importante y es que, además, debemos de explorar y descubrir nuestros talentos, y pues sentimos que desde el Festival Güejari nos ayuda a fortalecer las habilidades, recrear nuevas ideas e innovar más hacia el tema de la comunicación desde las diferentes líneas, para visibilizar los temas desde la territorialidad, memoria histórica y el rescate medioambiental”, afirmó el joven.
Dentro de los participantes llegaron varios jóvenes que se apasionan por la comunicación audiovisual, quienes manifiestan que conocer las experiencias de sus compañeros los anima a continuar trabajando por crear narrativas diferentes, que transformen el imaginario que existe sobre sus municipios.
Juan Esteban Espitia, de “Perla Films Colectivo Audiovisual, del municipio de Puerto Lleras, contó que con este evento “nos llevamos muchas experiencias, aprendizajes; creo que nos encontramos con personas que tenemos un mismo sentir, (amor por el cine, por contar, mostrar nuestros municipios) más allá de lo que siempre se ve y qué mejor que hacerlo quienes habitamos en los territorios”.
El festival Güejari se convirtió en la oportunidad ideal para reunir a los jóvenes de las subregiones del Bajo Ariari Sur, Macarena y Ariari. Estos municipios, que forman parte de los Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial (PDET) del departamento del Meta, sirvieron de escenario para fomentar la unión entre las comunidades.
Durante el evento, se fortalecieron los lazos de hermandad con el objetivo de construir una paz duradera.
“El hecho de poder llegar a un municipio, poder encontrarnos con jóvenes de diferentes, partes, culturas eso ya es un hecho histórico. Poder reunirnos y contarnos como están nuestros territorios y cómo desde nuestras actividades le estamos aportando a la paz y cómo transformamos, esto es gratificante e importante”, concluyó Ángel Saavedra, del colectivo Zagales de la Sierra de Mesetas y uno de los organizadores del evento, quien desde su liderazgo y pasión por lo audiovisual trabajan por la unidad y el rescate del tejido social.
En el Festival Güejari se realizaron talleres de formación radial, audiovisual, presentación de cortometrajes, actos culturales, muestras de BMX y recorridos por atractivo turístico; contó con el apoyo de Cooperación alemana (GIZ), colectivos de comunicación regionales y administraciones locales.
Esta región ha sido una de las más golpeadas por el conflicto armado que ha afectado al país durante más de seis décadas.
Como resultado, enfrenta estigmatización y carece de oportunidades educativas y laborales para su población. Ante esta situación, los jóvenes están decididos a buscar el cambio y han encontrado en el cine una valiosa oportunidad para lograrlo.
En este evento, escribieron y narraron las vivencias de dolor, desolación y nostalgia que experimentaron sus comunidades durante su infancia.
Hoy, reescriben esa historia con los colores de la paz, la esperanza y la reconciliación, convirtiendo al sur del Meta en una potencia turística. Su esfuerzo no solo refleja el deseo de un futuro mejor, sino que también resalta el potencial de estas regiones para atraer visitantes y compartir su riqueza cultural.