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De lo legal a lo radial: ¿cómo se logró la transmisión de ‘Kalimán’?

Juliana Santos, jefe jurídica de RTVC, relató cómo fue el proceso para adquirir los derechos de esta icónica serie.

La llegada de la famosa radionovela ‘Kalimán’ al dial de Radio Nacional de Colombia fue un proceso lleno de aventuras, descubrimientos y alegrías tan emocionantes como esta misma producción. Después de meses de investigación sobre la cadena de transferencia hereditaria de los derechos de la obra, RTVC Sistema de Medios Públicos en Colombia anunció el pasado 28 de enero la adquisición de la licencia que le permite transmitir las historias de este personaje a todo el país durante los próximos cinco años.

De esta manera, Kalimán y su amigo Solín regresan a la radio con 1.020 capítulos, divididos en siete series. La primera temporada, titulada ‘El tigre de Hong Kong’, cuenta con 81 capítulos que se podrán disfrutar de lunes a viernes a las 7 p.m., a través de las 57 frecuencias de Radio Nacional de Colombia. Así mismo, después de la emisión, cada capítulo quedará alojado en la plataforma RTVCPlay.

En entrevista con La Onda Sonora, Juliana Santos, jefe jurídica de RTVC, relató cómo fue el proceso para adquirir los derechos de esta icónica serie, éxito en Colombia entre 1965 y 1995.

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El año pasado, RTVC decidió aplazar el lanzamiento de ‘Kalimán’, ¿qué fue lo que sucedió y qué pasó después?

Esto ha sido un tema muy importante para nosotros. Desde marzo del año pasado, cuando Radio Nacional tuvo la inquietud de realizar la transmisión de la obra Kalimán, una radionovela ícono de todas estas producciones familiares, la intención era hacer todo este desarrollo y mirar cómo, a través de la producción, se enviaba un mensaje positivo para toda la sociedad en esos momentos de confinamiento.

En ese momento, cuando íbamos a iniciar todo este camino y empezamos a preparar todos los documentos para poder salir en el lanzamiento, el mismo día de la que sería la primera emisión, recibimos una reclamación. Nos dicen que los derechos de autor los ostenta una empresa en particular. Ahí se abre toda una situación en la que el equipo legal de RTVC tiene que hacer una intervención, con el fin de garantizar los derechos del titular de la obra. Esto es completamente acorde con los fines de RTVC pues, como entidad pública, somos respetuosos con la protección de los derechos de autor.

Así empezamos a trabajar, a hacer una investigación con el fin de estudiar y revisar toda la titularidad de la obra. Todo esto nos lleva casi que a reconstruir la cadena de transferencia de las diferentes familias que han sido herederas de todos estos derechos. Nosotros estamos reconstruyendo casi 55 años de historia de lo que es Kalimán.

Jurídicamente, la situación nos llevó ante organismos del orden nacional. Estuvimos con la Dirección Nacional de Derechos de Autor, estuvimos con asociados de gestión colectiva para mirar como había llegado esto al país y como estaba la titularidad frente a Colombia. Después hicimos un recorrido por organismos internacionales. Llegamos a Ciudad de México y empezamos a tener una interacción y una comunicación con otras entidades que protegen los derechos de autor. Ahí encontramos todos los registros de transferencia.

Entonces esta no es una labor que solamente tuvo un componente legal, sino que también tuvo un componente histórico para conocer todo esto para, finalmente, poder llegar a conocer toda la cadena de transferencia legal que tenía esta obra tan importante para Radio Nacional, y no solamente para Colombia, sino para muchos países.

Kalimán es una marca que comprende fonemas e impresos. ¿Cómo esos derechos se pueden ir ramificando según el producto y según el país?

Cuando nosotros entramos a hacer toda esta revisión, miramos cuál era el material con el que contaba RTVC. Desde 2018 tenemos una transferencia del dominio de unos archivos de tipo sonoro. En esa condición había una titularidad, pero solo en calidad de un productor fonográfico que se recibía en archivo sonoro.

Entramos a asesorar a la entidad para ver cómo hacer la difusión de todo este tipo de material, porque hay que tener muy en claro hasta dónde llega la propiedad de un archivo sonoro y quién, finalmente, tiene la titularidad de la obra completa, para hablar del derecho de autor y poder saber si nosotros necesitamos una autorización posterior del dueño de la obra.

Cuando nosotros teníamos el archivo sonoro, podíamos hacer una difusión del material. Pero cuando tuvimos la reclamación, encontramos un autor que nos dice: “yo soy titular de toda la obra y cualquier difusión que se haga no solamente sonora, sino que se llegue a manejar publicidad en medios, necesita mi autorización”.

Ahí empieza a hacerse un estudio mucho más profundo para saber hasta dónde teníamos facultades para utilizar esto. Lo anterior nos llevó a este trabajo de ocho meses para ratificar que la empresa en México es titular de esos derechos de autor. Cuando se va a hacer la transmisión en diferentes países, hay que contar con una autorización de ese autor que es el titular de la obra, y así poder hacer las diferentes transmisiones, ya sean sonoras, en material publicitario o en la forma como se vaya a comunicar.

¿Se había enfrentado con una situación parecida? ¿cuál fue el resultado de todo este proceso?

Es un caso muy especial. Si bien es usual que se presenten reclamaciones por titularidad de obras antes de que sean producidas, dentro de mi experiencia, si es la primera vez que tengo un caso de esta trascendencia. Finalmente Kalimán es un ícono de todas las producciones familiares.

Este trabajo fue un referente de cómo se tiene que hacer todo un estudio de la cadena de transferencia hereditaria, para garantizar que al titular de la obra se le protejan estos derechos. Esto va muy a fin con lo que hacemos nosotros, los medios públicos, que es no solamente proteger los derechos del material que nosotros producimos, sino de todo el material que el canal emite.

Entonces, al encontrar una producción de esta trascendencia, había una responsabilidad nuestra como entidad e, incluso, como país. Por eso empezamos a hacer todo ese recorrido: para poder garantizar que una producción como ésta saliera con toda la seguridad y la tranquilidad de que se está respetando al autor de la obra y de quien en su momento es el titular.

Esto marca una pauta para mí. En mi ejercicio profesional me siento muy orgullosa de que el Departamento Legal haya prestado una ayuda para que los colombianos reconozcan esta obra que marcó un hito en la radio. También lo es para la casa de los medios públicos, entregarle a Radio Nacional, a la audiencia, este tipo de obras es importantísimo. En estos momentos es muy bueno tener la remembranza de obras que nos dejan un mensaje muy positivo a todos nosotros.

Escuche aquí la entrevista completa con Juliana Santos, jefe jurídica de RTVC, sobre la adquisición de los derechos para la transmisión de ‘Kalimán’ por Radio Nacional de Colombia: