Bucaramanga, destino gastronómico y puerta de Santander
Cuando el avión que aterriza en Palonegro abre las puertas y los visitantes empiezan a descender del aeropuerto, el olor a la piña de Lebrija y el de café que se cruza desde los cerros orientales, dan una cálida bienvenida a Bucaramanga y a Santander. Cualquier foráneo podrá sentir de inmediato que llegó a una ciudad llena de contrastes, sabores, gente amable y una gastronomía que gira alrededor de la carne.
Desde que esta ciudad era una pequeña villa con más fincas que edificios, la carne ha resultado en el ingrediente principal del plato para todas las comidas, sin importar la hora. Costumbre gastronómica heredada de los antepasados que dedicaban su vida como labriegos y que recibían como principal recompensa, un buen plato de comida, con carne.
Con el crecimiento desenfrenado de la ciudad, en la última década, se vivió un auge de las comidas rápidas relacionadas con la carne de res. ¿La pizza, el sushi o un kebab? Bienvenidos, pero si los restaurantes no tienen dentro de su oferta alguna hamburguesa, es muy probable el fracaso.
Por eso, en cada esquina, en cada barrio, en cada comuna, fácilmente se pueden encontrar múltiples restaurantes que ofrecen una hamburguesa, con algo particular. Así que el principal plan para disfrutar en la capital santandereana es buscar una buena hamburguesa.
Así, si usted llega este fin de semana a Bucaramanga para disfrutar de la fiesta futbolera, no se le olvide pasar por los restaurantes que ofrecen variadas opciones gastronómicas.
Seguramente, la emoción del sábado terminará en rumba. Son varias las ofertas que tiene la ciudad bonita en la llamada Cuadra Play o la Zona Rosa, para que azote la baldosa como no está escrito. Y cuando sean las dos o tres de la mañana y el hambre le vuelva a pedir, visite los restaurantes que ofrecen los tradicionales caldos de carne, de huevo o la arepa de maíz pela.
Otros lugares cercanos a Bucaramanga que puede visitar son el Cerro del Santísimo, el casco antiguo de Girón, la Mesa de Los Santos o el páramo de Santurbán.
Si sigue estas recomendaciones, su estancia en Bucaramanga será inolvidable. Ahora, si lo que desea es seguir conociendo Santander, bienvenido, porque recuerde que quien pisa tierra santanderereana, es santandereano.
Provincia Guanentina
Uno de los destinos favoritos por los turistas que llegan a Santander es la provincia Guanentina, una región que ofrece turismo de aventura, de historia, de naturaleza y hasta religioso acompañado por una buena dosis de gastronomía típica.
En esta región de Santander se encuentra Barichara, uno de los municipios más visitados de Colombia que gracias a sus calles empedradas, sus paredes de tapia pisada y techos de teja, lo hacen uno de los destinos predilectos por los miles de turistas que llegan cada año en busca de tranquilidad o simplemente para admirar el trabajo de los artesanos que convierten la piedra en obras de arte.
Si está buscando adrenalina los destinos son los municipio de San Gil y Curití, que gracias a su belleza y recursos naturales ofrecen deportes de aventura como espeleología, canotaje en el río Fonce, torrentismo en las cascadas de Juan Curí, caminatas ecológicas, bonding jumping, o un corto vuelo en parapente desde el Parque Nacional del Chicamocha, que está ubicado a tan solo una hora de San Gil o de Bucaramanga.
Si su plan es un encuentro de fe, el municipio de Páramo lo espera, allí está ubicado el santuario de la virgen de la Salud, que cada año recibe a cientos de devotos en busca de un milagro, pero si en su visita a Santander quiere conocer sobre la cultura Guane, en el municipio que lleva el mismo nombre, puede encontrar un museo sobre las raíces de Santander.
El caño cristales santandereano, Las Gachas
Uno de los planes imperdibles para este fin de semana con puente festivo en Santander es visitar Las Gachas, unos pozos naturales que cautivan a propios y visitantes por su atractivo natural. Estuvieron cerradas a turistas durante varios meses, por la escasez de agua; sin embargo, con la llega de las lluvias ya se pueden usar.
El municipio de Guadalupe se ha preparado para recibir a decenas de turistas durante estos días. A las gachas se puede ir a pie o en vehículo, un camino en el que se pueden observar los imponentes paisajes de Santander.
En la Provincia Comunera también puede visitar y conocer el municipio de Socorro, lleno de tradición e historia, cuna del maestro Jose A. Morales y tierra de Manuela Beltrán. Este es uno de los municipios más visitados en Santander, pues tiene las puertas abiertas para que visitantes recorran las calles empedradas y visiten la Basílica Menor, Nuestra Señora del Socorro, una de las más preciosas del municipio y Colombia.
Zapatoca, el municipio de clima de seda
A dos horas y media de Bucaramanga se ubica el municipio de Zapatoca, Santander, conocido como el pueblito de el “clima de seda” o la “ciudad levítica”.
Este es considerado como uno de los viajes más amenos por las carreteras del departamento de Santander gracias a la majestuosa vista que se forma en el descenso hacia el cañón del río Chicamocha: una maravilla geográfica que se da gracias a la unión del río Suárez con el río Chicamocha.
De esta manera este municipio hermoso y poderoso en turismo, cuenta con una amplia gama de actividades a desarrollar. En esta se puede vivir una mágica aventura en la Cueva del Nitro, también deleitarse con la caída del sol en el Mirador Guane.
Para conectarse con la naturaleza hay senderos para recorrer y también caudales de agua como la cascada la Lajita, el Pozo del Ahogado o la Laguna del Sapo para las personas amantes de la desconexión.
Un paseo por el río Magdalena
A dos horas de Bucaramanga, se encuentra el río Magdalena, expandiéndose frente a Barrancabermeja, “la hija del sol”, una tierra cálida arropada por dinámicas ribereñas y con una tradición petrolera de más de 100 años de historia. Los sabores de un buen pescado frito-sudado con patacón y suero, o los recorridos en lancha y las paradas por los municipios frente a este inmenso cuerpo de agua recuerda lo inmensa que es la naturaleza y sus paisajes.
Una parada por Puerto Wilches en lancha es un plan para seguir descubriendo los colores y sabores del Magdalena; un recorrido por Tuc-tuc a las zonas refrescantes, paseos por las orillas de las ciénagas y reconocimiento de su hábitat.
Las músicas también hablan de las cumbias y sus tambores, el canto del tigre, así se denomina al jaguar, sus habitantes saben que pasa sin ser visto, el manatí, los cuidados y resguardos que han aprendido a tener los pescadores cuando encuentran alguno.
De camino a Barrancabermeja se encuentra la represa de hidrosogamoso, un mar de agua dulce que ofrece a los visitantes la oportunidad de un recorrido en lancha o la práctica de deportes acuáticos.