El maestro Adolfo Rafael Pacheco, en una entrevista no concertada y que brotó al natural en un hotel de Ibagué, en el marco del Festival Nacional de la Música Colombiana, se confesó con Radio Nacional de Colombia. Estas son algunas facetas desconocidas de su vida personal y sus vivencias como artista.
- El Juglar de los Montes de María nació en San Jacinto, Bolívar, el ocho de agosto de 1940. Su padre fue el comerciante Miguel Pacheco Blanco, y su madre, Mercedes Anillo Herrera, ama de casa. El maestro se declara orgulloso de sus orígenes mestizos porque, de un lado, su bisabuelo Silverio Pacheco era blanco, oriundo de Ocaña, Norte de Santander, y de otro, su bisabuela Cruz Estrada, de origen africano, había sido esclavizada en su juventud.
- Su abuelo paterno, Laureano Antonio Pacheco Estrada, decimero e intérprete del tambor, le enseñó los primeros pasos musicales. Él fue testigo de la que se cree fue la primera composición del artista cuando apenas tenía siete años, una puya llamada Mazamorríta crúa.
- Estudió primaria en San Jacinto, en el Instituto Rodríguez, y el bachillerato en el Colegio Fernández Baena, en Cartagena, claustro en donde se apasionó por la literatura. Comenzó estudios de Ingeniería en la Universidad Javeriana, de Bogotá, pero la quiebra económica de su padre lo obligó a regresar a San Jacinto.
- El viejo Migue, su padre, no apoyó los deseos de Adolfo de convertirse en músico con el argumento de que los artistas se dedicaban “al ron y a la parranda” o siempre vivirían pobres porque les pagaban con comida y trago. Aun así, el maestro se convirtió en compositor, intérprete del redoblante, guitarrista y guacharaquero.
- Adolfo Rafael se considera un compositor versátil que domina varios ritmos de la región sabanera de Bolívar, Sucre y Córdoba, especialmente el porro, la cumbia, la gaita, el chandé y el merengue. También es un experto en los cuatro ritmos del vallenato: paseo, merengue, son y puya.
- Son cuatro las canciones que él denomina “Mis cuatro flores”: Mercedes, El viejo Miguel, El mochuelo y La hamaca grande. Las tres primeras fueron compuestas a comienzos de los años 60 y la última, en 1969. A estas se suman, por lo menos, otras 160 que han sido grabadas por él y famosos intérpretes del Caribe colombiano.
- Mercedes, es un canto a un amor irrealizado con una joven a la que le propuso matrimonio y luna de miel en Cartagena. Ella nunca aceptó la propuesta porque Pacheco convivía con otra mujer con quien tenía cuatro hijos. En la entrevista con Radio Nacional de Colombia el artista confesó que Mercedes no se llama así, sino Ana Dolores Arrieta. Ella vive actualmente en Cartagena.
- El viejo Miguel es su padre, Miguel Pacheco Blanco, uno de los hombres más prósperos de los Montes de María, a quien la quiebra de sus negocios lo obligó a dejar San Jacinto para refugiarse en Barranquilla, lejos de la familia y sus amigos. El maestro relató su motivación: “Se la hice a mi papá, para reivindicarlo, porque se fue contra el suelo”. El viejo Miguel tuvo 21 hijos con distintas mujeres.
- La hamaca grande fue una obra que irrumpió con fuerza propia en 1970 cuando su maestro Andrés Landero la interpretó en el Festival de la Leyenda Vallenata, en Valledupar. Esta composición no concursó oficialmente en el evento, pero marcó un hito entre la música sabanera y la vallenata. De esta canción hay cerca de 80 versiones. Las más conocidas ls grabaron Andrés Landero, Adolfo Pacheco, Alfredo Gutiérrez, Los Hermanos Zuleta, Carlos Vives con Egidio Cuadrado y el dominicano Johny Ventura.
- El mochuelo es su reconocimiento como negro de origen africano. En su relato dijo que esta inspiración surgió en Bogotá luego de que una mujer lo llamara “negro malparido”. Ese insulto lo obligó a investigar sus orígenes y a tomar como ejemplo un ave negra y de hermoso cantar que habita en los Montes de María. Joche, un hombre de la región, cazó a pedido suyo un mochuelo y él se lo regaló a Ana Dolores Arrieta, la inspiradora de Mercedes.
- El deseo de su padre de que fuera abogado porque “se expresaba muy bien”, solo se materializó cuando Adolfo Rafael era un hombre maduro. En efecto, el 1976, a los 36 años, ingresó a estudiar Derecho en la Universidad de Cartagena. Allí se graduó en 1983 con una tesis sobre derechos de autor. En esa universidad conoció a la abogada Lady Anillo con quien se casó en 1976. A ella le dedicó El tropezón, una canción que popularizó Diomedes Díaz.
- Fue director del Departamento de Transporte y Tránsito de Bolívar y diputado a las Asambleas Departamentales de Bolívar y Atlántico. Lo curioso es que primero lo hizo a nombre del Partido Conservador y luego se presentó con las banderas del Partido Liberal.
- Otras canciones famosas del músico conocido también como El sanjacintero mayor, son El diputado, El profesor, El pergamino, El cordobés, Gallo Bueno, Mi niñez, Oye, Te besé y Tu serenata.
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