Soy boyacense de pura raza,
amo a mi tierra como a mi mama,
siempre de abrigo llevo una ruana
hecha en el viejo telar de casa...
Son los famosos versos iniciales del clásico de la música andina colombiana, el bambuco “Soy boyacense”. Cuenta la historia que su autor, el compositor Héctor José Vargas Sánchez, empezó a escribirlo en 1960, como una suerte de merecido homenaje a las bellezas de su natal departamento de Boyacá. Dos años después, le incorporó dos estrofas intermedias y lo estrenó en el Club del Comercio de Duitama. Y luego, en 1973, le adicionó una introducción dedicada al ancestro indígena de su región.
Desde esos primeros esbozos, "Soy boyacense" estaba llamado a convertirse en un estandarte de su tierra, y en julio de 1994, mediante la ordenanza No. 008 del 8 de julio de 1994, la Asamblea de Boyacá lo declaró Himno Popular del departamento.
Nacido en el municipio boyacense de Tinjacá en julio de 1921, su creador, Héctor José Vargas Sánchez fue compositor de alrededor de 150 temas, un tercio de los cuales fueron musicalizados por él mismo. Tiplista autodidacta y a lo largo de su vida trabajador en cargos públicos en entidades policivas y como concejal e incluso alcalde de varias poblaciones de su departamento, en 1949 escribió "Celos", su primera pieza, y un año después integró su primer dueto, al lado del recordado compositor llanero Miguel Ángel Martín.
Fue tal la potencia de “Soy boyacense” que a Vargas prácticamente se le recuerda sólo por ese tema, pero en su momento tuvo la oportunidad de grabar algunas otras de sus composiciones como “Indiecita”, “Yo me caso”, “Mamá Florinda”, “Ritmo caliente”, “Hacia el Llano”, “Retorno” y “Mis remolachas”, al lado de la estudiantina Los Folclóricos, que fundara con compañeros del extinto Departamento Administrativo de Seguridad, DAS, donde se desempeñó como jefe de Seguridad hacia 1965.
Grabado por artistas como Silva y Villalba, Los Tolimenses, Zabala y Barrera, Jorge Ariza y muchos intérpretes más, "Soy boyacense" se ha convertido en un canto al orgullo de haber nacido en esas tierras, e hizo de Vargas una figura inmortal. Muchas otras de sus piezas permanecen inéditas, y siguen siendo interpretadas por sus hijos, quienes conformaron una agrupación al lado de su padre que solía presentarse en radio y televisión. El compositor falleció en Chiquinquirá, el 28 de mayo de 1996.
El 4 de julio conmemoramos 100 años del natalicio del compositor boyacense Héctor Vargas, reconocido por su clásico “Soy boyacense”. Por eso es nuestro Artista de la Semana.