Las lluvias y altos oleajes sobre el Golfo de Urabá han complicado la salida de alrededor de 14 mil migrantes, en su mayoría provenientes de Haití, hacia Panamá. Además, las condiciones de salubridad en las que se encuentran, sumadas al clima, han ocasionado afectaciones en la salud.
“Nuevamente estamos en emergencia, más de 14 mil migrantes están hoy represados en el municipio. Debido a un acuerdo entre las dos cancillerías, Panamá solo está aceptando 500 personas al día; mientras que al municipio llegan entre 800 y 1.000 migrantes a diario”, aseguró el alcalde de Necoclí, Jorge Tobón.
La llegada masiva de migrantes a esta localidad del Urabá antioqueño genera un despliegue logístico por encima de su capacidad. “Eso genera demanda de agua potable, vivienda para ellos, entonces en cualquier momento ya nos veríamos obligados a llamar la atención al Estado con alguna medida de cierre de todas áreas de migrantes del casco urbano”, afirmó el personero, Francisco Menco.
“Tenemos colapsados los servicios médicos, el hospital, urgencias, hospitalización. Si la fuerza pública no nos acompaña con los controles en la vía hacia Medellín se va a agudizar más esta situación”, agregó el mandatario local.
Las autoridades de Necoclí hicieron un llamado al gobierno panameño para que aumente el número de personas que reciben a diario y así buscar soluciones eficaces a la crisis migratoria. “Tenemos tiquetes vendidos hasta el 27 de septiembre, no sabemos cuántos migrantes van a llegar a Necoclí en este tiempo”, concluyó Tobón.