Alojamientos y restaurantes que están a una distancia de 15 kilómetros del Volcán Nevado del Ruiz, se encuentran cerrados desde que el nivel de actividad cambió de amarilla a naranja el pasado 30 de marzo.
La medida de cierre ha generado pérdidas económicas en por lo menos 10 hoteles y alojamientos de la zona, sumado a las agencias de viajes, guías turísticos y demás personal. A esta situación se suma la realidad de los comerciantes de la vereda Gallinazo, del municipio de Villamaría, que están por fuera del perímetro de la zona de riesgo del volcán, pero que también tiene pérdidas por el temor que ha generado en la comunidad en general la situación del volcán.
Ante la situación, el gobernador de Caldas, Luis Carlos Velásquez Cardona, le solicitó a la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres reducir de 15 a 10 kilómetros, la zona de alto riesgo del volcán para reactivar la economía en la zona.
“Esos 5 kilómetros de diferencia son fundamentales para la economía del departamento. No es relajarnos, es seguir trabajando como lo estamos haciendo, con el objetivo de que los hoteles termales puedan tener mejor desempeño económico y agroindustrial, al igual que las familias del sector que dependen de ofrecer bienes y servicios de cara al turismo”, explicó el gobernador.
El mandatario aclaró que esta solicitud no cambia la invitación de desalojo para las familias de la zona. Actualmente, 20 familias han evacuado y 21 menores están donde familiares. Dijo además que para que esta solicitud sea viable se necesita un concepto técnico por parte del Servicio Geológico Colombiano, teniendo en cuenta, la caída de fuegos piroclásticos y los lahares.
Además, el gobernador le pidió al Gobierno Nacional dos combos de maquinaria amarilla, combustibles, kits de alimentos para animales y se adelantará un diálogo con las empresas de telefonía celular en las partes altas del nevado donde no hay señal y esto dificulta las alertas tempranas.
Afectaciones en el sector turístico
El sector de Gallinazo queda a 20 minutos de Manizales y es reconocido por su diversa gastronomía como la venta de chorizos, comida típica, asados, arepas y plátanos maduros con queso, entre otros y por ser una zona de aguas termales. Unas 25 familias viven de las ventas, en especial los fines de semana, pero debido al temor que ha generado entre los visitantes la actividad del volcán, los comerciantes han reportado pérdidas económicas. Por esta razón la Alcaldía de Villamaría avanza con la campaña "La economía está en riesgo, nuestra zona no".
Cotelco en Caldas estima pérdidas por 2 mil 900 millones de pesos solo en el sector hotelero de Manizales en el mes de abril, a lo que se suma la pérdida de empleos directos e indirectos. Según Juan Pablo Alba, director ejecutivo, la ocupación hotelera ha registrado una pérdida de casi 15 puntos. “Rodeando las cifras la ocupación hotelera ha estado en un 35 por ciento en todo el mes”.