Migración del Cangrejo Negro, un espectáculo natural que solo se ve en Providencia
La especie de cangrejo negro gecarcinus ruricola se encuentra en vía de extinción por lo que las autoridades departamentales aúnan esfuerzos para su preservación.
Entre los muchos atractivos con los que se busca reactivar la economía y el turismo en Providencia y Santa Catalina tras el paso del devastador huracán Iota, se encuentra el turismo ecológico que ofrece, entre otras cosas, presenciar la migración del cangrejo negro que, sin duda, es casi una obra maestra de la madre naturaleza.
Cada año, del 1 de abril al 31 de julio, las carreteras desde el kilómetro 10 al kilómetro 15 en los sectores de Fresh Water Bay y South West Bay en Providencia son ocupadas por miles de cangrejos negros que en una travesía por desovar, bajan desde las montañas y cruzan las calles para llegar al mar.
Teniendo en cuenta esta época de migración y desove del cangrejo negro, la Alcaldía Municipal, por medio de la Secretaría de Agricultura y Pesca, emite cada año un decreto que establece el cierre nocturno de las vías y la prohibición en el tránsito para todo tipo de vehículos y automotores con el fin de garantizar que la especie pueda realizar su proceso.
Es así como desde las 5:00 de la tarde hasta las 6: 00 de la mañana, horarios previamente establecidos teniendo en cuenta que es el momento del día en que se presenta mayor tráfico de la especie, que opta por transitar de noche debido a su sensibilidad al sol durante esta época, un número limitado de peatones puede presenciar este gran espectáculo.
De acuerdo a Arne Britton, director de la Corporación para el Desarrollo Sostenible Coralina, durante este periodo el objetivo principal de la entidad es proteger la especie que se encuentra en vía de extinción, motivo por el cual recomiendan a la comunidad en general abstenerse de transitar en la zona, sobre todo en horas pico para que los cangregos puedan transitar sin ningún tipo de peligro.
En entrevista con Radio Nacional de Colombia, el funcionario igualmente indico que en San Andrés aún no ha sido posible que el gobierno emita un decreto con la prohibición de movilidad, pero se trabaja con inspectores ambientales en sensibilizar a la comunidad para reducir el índice de mortandad de esta especie.
Entre los muchos aspectos que amenazan a esta especie que, de acuerdo al Instituto Humboldt, en Colombia solo habita en el Archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina, está la quema de suelos a causa de los constantes incendios forestales que se presenta en la isla, la perdida de vegetación tras el paso de los huracanes Eta y Iota, la tala de árboles, la urbanización y la caza indiscriminada de las hembras ovadas.
Las autoridades de la isla recuerdan a la comunidad que durante la veda queda prohibida la caza, transporte, procesamiento y comercialización de la especie. El coordinador de control y vigilancia de la corporación ambiental Johnny Walker advirtió que, aunque estas acciones no se encuentran tipificadas como delito ambiental, si podría considerarse consumo de recursos naturales sin autorización, y para quienes reincidan en el incumplimiento de la norma tendrán sanciones legales contempladas en el Código de Policía, multas comunitarias y multas monetarias de hasta 160 salarios mínimos legales vigentes.