La conflagración, que no dejó pérdidas humanas, dejó en la calle a tres familias que lo perdieron todo y aún siguen sin comprender cómo se originó este incendio.
El cuerpo de bomberos de la zona, la comunidad y la lluvia que caía justo en el momento del incendio, ayudaron a apagar las llamas que se extendieron en las tres viviendas de madera.
“Todas las casas estaban solas. Algunos estaban en misa, el de otra casa estaba en Quibdó y los otros andaban, por otro lado, y no se sabe nada. Todo se perdió, no quedó nada”, indicó María Zenaida Manyoma Córdoba, una de las personas afectadas con el incendio.
Fueron momentos de angustia y tensión los que vivieron los habitantes del barrio Mis Esfuerzos. Líderes como Alirio Manyoma quien, a pesar de todo, agradece la caída de la lluvia en el momento preciso.
“Gracias a Dios se vino un aguacero y en la medida que el incendio cogía fuerza, el aguacero se vino más duro. Los bomberos no aparecían por ningún lado… Hicimos una cadena y echamos agua hasta que logramos”, manifestó Alirio.
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Las tres familias afectadas solicitan ahora la ayuda a la alcaldía y gobernación, para poder resguardarse y recuperar los enseres perdidos.