El panorama es esperanzador para familias de la región del Catatumbo que, por diversas circunstancias, quedaron en una situación económica difícil. Sin embargo, con el paso del tiempo, lograron hacer parte de programas ofrecidos por el Estado y otras organizaciones que hacen presencia en la zona del Catatumbo. Ahora su presente está distante de la pobreza.
Agricultores, emprendedores, cooperativas y habitantes de la región cuentan cómo se ha logrado mediante la articulación entre víctimas del conflicto y la institucionalidad, salir de la pobreza en la que el conflicto las sumió.
El café ha sido uno de los productos bandera que les ha permitido recobrar la estabilidad de su proyecto de vida.
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