Desde hace algunos meses el IPBA ha advertido el incremento de casos de ‘distemper canino’, una enfermedad que además de ser mortal es altamente contagiosa entre perros. De acuerdo con Adriana Estrada, directora general del Instituto Distrital de Protección Animal, se estima que las cifras de contagio han aumentado a 42%, pero lo más alarmante es el tipo de circunstancias donde se produce la enfermedad
Según la funcionaria, de los animales que han ingresado al Instituto de Protección y Bienestar Animal, el 56% eran animales en estado de abandono o sin tenedor reconocido, entre otros factores, y el 44% son perros que, en la mayoría de los casos, fueron llevados a la entidad por aprehensión material preventiva al no tener las condiciones para una vida digna y libre de crueldad.
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Sin embargo, el mismo IPBA y la Universidad de Ciencias Aplicadas y Ambientales (UDCA), manejan la teoría que podría tratarse de un linaje diferente del virus, por lo que han iniciado estudios de casos para conocer qué tan efectiva está siendo la vacunación actual con esta posible nueva cepa.
“Este brote de distemper en Bogotá es un problema de todos los que amamos a los animales, es un problema de todos los tenedores, de los adoptantes, del vecino que mira indiferente cómo un animal está enfermo en la calle; es un problema que debemos abordar solidariamente. Hago un llamado afectuoso a todos mis amigos animalistas para que entendamos la importancia, por la gravedad del brote de distemper que tenemos. Los invito a ser parte de la solución y de la disminución del dolor de un grupo de animalitos. Es un problema de todos, por lo tanto, el llamado es a que todos contribuyamos a resolverlo” explicó Teresa Carvajal Salcedo, decana facultad de ciencias agropecuarias, UDCA.
Datos importantes sobre el moquillo
El moquillo canino o distemper tiene una dinámica de contagio alto y grave, es similar al sarampión humano, con altos índices de mortalidad y ataca fundamentalmente al aparato digestivo, respiratorio e incluso el sistema nervioso central en sus fases más avanzadas, por lo que aquellos caninos que logran superarla, usualmente quedan con secuelas, explicó el médico veterinario, activista y concejal animalista de Medellín, Juan Jiménez Lara.
Jiménez también afirmó que otras especies pueden padecer esta enfermedad, por ejemplo zorros y hurones, por lo que es necesario que en zonas rurales donde estos animales cohabitan con perros domésticos, se deben extremar las medidas de cuidado y prevención.
“El virus está presente en las secreciones de la nariz y las lágrimas, estas se esparcen como un aerosol en forma de gotitas diminutas haciendo más difícil su control y los perros infectados pueden diseminar el virus durante varios meses”, añadió el veterinario.
Sobre la pregunta si el distemper puede transmitirse a los humanos, Juan Jiménez entregó un parte de tranquilidad y, sobre todo, hizo un llamado para no abandonar a sus perros por rumores sin fundamento.
“Esta es una enfermedad no zoonótica, es decir que no se pasa de animales a su familia humana, sin embargo, las personas que convivan con muchos animales si pueden ser un factor de riesgo para perros no vacunados. Por ejemplo, cuando estamos en contacto con un perro enfermo, su entorno o sus fluidos, el virus se impregna en la ropa, los zapatos e incluso la piel o el pelo. Si no nos hemos desinfectado bien antes de acercarnos podremos contagiarlo” puntualizó el experto.
Por último, el profesional señaló que el virus tiene 3 fases reconocibles de desarrollo:
- Primera fase: fiebre intermitente acompañada de falta de apetito y energía.
- Segunda fase: secreciones en ojos y hocico que pueden ser transparentes o verdosas. Deshidratación, pérdida de peso y decaimiento.
- Tercera fase: diarrea y/o vómito abundante, lesiones con pus en la piel, engrosamiento o sequedad de la nariz o de las huellas plantares. Cambios de coloración en los dientes, ceguera total o parcial, salivación, movimientos involuntarios de la mandíbula, temblores musculares, convulsiones, parálisis, incoordinación, fotofobia, signos de dolor, aullidos y muerte.
Medidas de prevención
El Instituto de Protección y Bienestar Animal IPBA de Bogotá lanzó las siguientes recomendaciones a los tenedores, rescatistas y albergues de todo el país para evitar su proliferación y como medida para ser un cuidador responsable:
La vacunación es la herramienta más útil. El refuerzo anual en animales adultos es supremamente importante, así como iniciar la vacunación a tiempo en los cachorros que son más vulnerables a este virus.
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Evitar el contacto con otros perros si hay signos clínicos y, ante la presencia de estos, acudir al veterinario de confianza.
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Extremar las medidas de desinfección, aunque no se transmite a los humanos, estos si pueden generar contaminación cruzada hacia sus perros, si han estado en contacto con animales sin vacuna o con síntomas.
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Limpiar las patas y hocico de los canes al llegar del parque, especialmente con pañitos veterinarios o agua jabonosa, cuidado de no lastimar ojos y hocico en el proceso.
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El IPBA también señaló que viene adelantando jornadas de vacunación extraordinaria en conjunto con la Secretaría Distrital de Gobierno para fortalecer las medidas de prevención, fundamentalmente en la aplicación de vacunación de antivirales a través de los presupuestos participativos en las localidades.
Recuerda que en la vacunación está su salvación. Te invitamos a aplicar el esquema de vacunación completo a tus mascotas para prevenir esta y otras enfermedades dolorosas. Comparte en nuestro grupo de Facebook una foto de tu perro con su carné de vacunas y no te pierdas la programación de Exploremos, un espacio para aprender.