Migración Colombia expulsó del territorio nacional al destituido teniente de la Policía de Ecuador, Germán Cáceres.
Oficiales adscritos a la Regional Aeropuerto El Dorado protocolizaron la expulsión del extranjero requerido por las autoridades de su país mediante circular Roja de Interpol, por el delito de feminicidio de su esposa y abogada María Belén Bernal, ocurrido en Quito el 11 de septiembre de 2022.
Cáceres fue detenido la semana pasada en el corregimiento de Palomino, jurisdicción de La Guajira, en medio de labores conjuntas realizadas por las Fiscalías de Colombia y Ecuador, así como del CTI y el Ejército Nacional. Posteriormente fue trasladado a Bogotá, donde se adelantaron los procedimientos para su expulsión inmediata.
Con esta medida se materializa el compromiso del presidente Gustavo Petro con su homólogo de Ecuador Guillermo Lasso, de colaborar para dar con el paradero del extranjero solicitado por un juez de familia de Ecuador.
De acuerdo con la información suministrada, el hombre de 29 años se hacía pasar por otra persona en el territorio nacional, lo que le permitió trabajar en un establecimiento comercial. Ingresó al país de manera irregular luego de comparecer ante las autoridades ecuatorianas por la desaparición de su esposa.
La medida migratoria de expulsión de Germán Cáceres se sustentó en el requerimiento del juez ecuatoriano e implica la prohibición de ingresar a Colombia dentro de los 10 años, contados a partir de la fecha de su salida del país. Migración Colombia explicó que contra esta decisión no proceden recursos.
Un caso que conmocionó a Ecuador
Según la investigación, María Belén Bernal desapareció el 11 de septiembre de 2022 luego de visitar a Cáceres en la Escuela Superior de Policía de la ciudad de Quito, donde se desempeñaba como instructor. Testigos aseguran que, durante el encuentro, en la habitación donde estaba la pareja escucharon golpes y gritos de auxilio por parte de la mujer, por lo que las primeras hipótesis arrojan que el homicidio ocurrió dentro de las instalaciones de esa institución.
La joven fue hallada muerta 10 días después de su desaparición, en un cerro cercano a la Escuela Superior de Policía de la capital ecuatoriana.
Desde entonces, el exuniformado permanecía prófugo de las autoridades ecuatorianas.