la Fiscalía deberá seguir investigando la muerte del joven Alejandro Pizano, que se dio el 11 de noviembre de 2018, tres días después del deceso de su padre, Jorge Enrique Pizano, excontroller de Odebrecht.
El juez tercero penal del circuito con función de conocimiento de Funza indicó que Alejandro "murió por haber ingerido líquido de la botella marca OMI que contenía cianuro de potasio que se encontraba en el escritorio de la habitación de su progenitor de la casa principal de la finca El Ático", y es lo único que está demostrado. Por lo que se establece que tanto Jorge Enrique Pizano, como su hijo, ingirieron de la misma botella que contenía cianuro.
"Existen dudas sobre las causas de la muerte del controller, además de las contradicciones de varios de los testigos que presentó la Fiscalía General de la Nación", indicó el juez.
Así pues, según el funcionario, "la Fiscalía pretendió justificar la muerte de Alejandro Pizano presentando a su padre como el posible autor del delito de homicidio accidental", y se deberá investigar la muerte violenta del joven de ahora en más.
¿Quién era Jorge Enrique Pizano?
Era una de las piezas clave de la investigación por el caso de corrupción de Odebrecht. Como controller de la concesión Ruta del Sol II, tenía claro lo que sucedia con el pago de sobornos y demás hechos irregulares. Pizano falleció el 8 de noviembre de 2018, inicialmente se pensó que su muerte habia sido por causas naturales derivada del Cáncer. Sin embargo, la incertidumbre empezó luego de que su hijo muriera tres días después, tras ingerir el contenido de una botella que estaba en la oficina de su padre.