Hoy inició la medida creada por el Gobierno Nacional para reducir en un 50 % el precio del Seguro Obligatorio de Accidentes de Tránsito y evitar la evasión del mismo.
Después de su anuncio, esta iniciativa creó preocupación entre los gremios e instituciones de salud, pues ponía en tela de juicio la financiación destinada para este sector, ya que reducir los precios implicaría menor dinero para cubrir temas de salud, como el régimen subsidiado.
Sin embargo, la ministra de Salud y Protección Social dio un parte de tranquilidad asegurando que no hay afectaciones a los servicios de salud por esta estrategia, pues la financiación será compensada.
Según la jefe de cartera, la adición presupuestal -como resultado de la reforma tributaria- permitirá que los recursos se compensen al sector salud y que las clínicas y hospitales puedan continuar con su financiación para la prestación de los servicios requeridos.
Corcho explicó cómo será la gestión del dinero para hacer sostenible esta estrategia: de lo recaudado por el Soat, un 45 % irá al ADRES para cubrir gastos de los vehículos fantasma y del sistema general de seguridad social en salud; por otra parte, el 55 % restante se destinará directamente a las aseguradoras.