La historia de la Familia Castañeda se remonta a la década de los años 30, cuando un grupo campesinos, provenientes de la zona oriental de Nariño y que pasaban hacia la iglesia de Las Lajas, llegaron con su trasteo al Batallón de Boyacá, donde don Alfredo Torres Arellano gritó: “¡Que viva la Familia Castañeda!”.
Con el paso de los años, la Familia Castañeda se incorporó con su propio día en el Carnaval de Negros y Blancos el 4 de enero. Este año, por la contingencia de la pandemia, los personajes tradicionales se ubicarán en la exhibición del 6 enero, donde se podrá apreciar y escuchar al pregonero de ‘Pericles Carnaval’.
La historia de Pericles
Pericles es un muñeco que tuvo origen en 1925 en el Festival Estudiantil de la Universidad Nacional de Colombia. Sin embargo, en 1932 se incorporó al Carnaval de Negros y Blancos, siendo representado por diferentes personas, e inicialmente era a quien le daban la bienvenida en esta festividad. Posteriormente, se asignó como el encargado de dar inicio al desfile de la Familia Castañeda.
Javier Guerrero ha sido uno de los representantes de Pericles Carnaval por más de 30 años: “Es una experiencia muy gratificante. De hecho, mi nombre de pila desapareció, porque todos me llaman Pericles y me da mucha satisfacción, porque he dejado una huella en la retina y en la memoria del pueblo pastuso”, afirma.
Este personaje icónico del carnaval ha tenido varios representantes que han iniciado desde su niñez. Javier ha pasado más de la mitad de su vida interpretando y encabezando la Familia Castañeda, brindando alegría, jolgorio, alevosía, tradición y mucho color a las personas que disfrutan del carnaval.
“Aún conservo la alegría y la energía para vivir nuestro carnaval, pero son pasos que se van dando y de las que las nuevas generaciones se van apropiando”, dice Guerrero.
En este año, el representante de este personaje se llama Arnoby Insuasty y lleva seis años apropiándose y rememorando la historia de la Familia Castañeda. “Para mí es un sueño, desde que era pequeño participaba en el Carnavalito y desde hace seis años ha sido aceptada mi propuesta para convertirme en Pericles”, comenta.
Vestido de blanco y con sombrero de copa, un bastón y su cara pintada de blanco, para Arnoby, Pericles siempre ha sido “sinónimo de alegría, de jolgorio de darle la bienvenida al Carnaval y cada uno desde sus hogares puede ser un Pericles al ser anfitrión de las personas que vienen de otros lados”.
El próximo 6 de enero, sobre la Carrera 27 de la ciudad de Pasto, no solo estarán expuestas las carrozas no motorizadas y motorizadas, sino que también se podrá disfrutar del pregonero más famoso de la fiesta más importante del sur de Colombia.