La mesa navideña en el Chocó es un reflejo de la diversidad étnica que caracteriza a la región. Las comunidades afrodescendientes e indígenas han sabido fusionar sus raíces ancestrales con la influencia de la colonización, creando así una rica amalgama de sabores, colores y texturas que se despliegan en cada platillo.
En la mesa navideña chocoana, el pescado es una estrella indiscutible. Las zonas rivereñas proporcionan una abundancia de pescado fresco, que se prepara de diversas maneras para deleitar los paladares durante las festividades. El tapado o tapao, como lo dicen los locales, es una de las preparaciones más tradicionales en esta época del año.
Para prepararlo ponen en una olla el pescado de su preferencia, aromatizado con especias y condimentos varios, y en esa misma olla colocan el plátano o guineo con el que se acompañará. Todos los ingredientes son tapados con hojas de plátano y se dejan cocer al vapor por 15 o 20 min.
Por otro lado, para los indígenas la Navidad es una tradición adoptada del catolicismo. José Luis Dogirama, un habitante de la comunidad emberá del municipio de Bojayá, dice que dentro de su étnica no existe la creencia del nacimiento del niño Jesús, sin embargo, aprovechan el mes de diciembre para reunirse en familia y compartir con su comunidad.
Una preparación típica de está época, y que lamentablemente se ha ido perdiendo entre los más jóvenes de la comunidad, es el Birimbí. Un preparado con maíz que se deja remojar durante 8 días, cambiando el agua diariamente, y luego se cocina hasta deshacerse por completo por alrededor de 3 horas hasta conseguir una masa espesa que se puede consumir como una especie de natilla o se prepara una bebida.
Sin embargo, detrás de estos manjares se encuentra una realidad significativa: las comunidades afrodescendientes e indígenas del Chocó enfrentan desafíos para preservar sus tradiciones culinarias. La amenaza de la pérdida de tierras, la influencia de la globalización y otros factores han generado una lucha constante por mantener viva la esencia de la cocina tradicional.
En este contexto, la Navidad se convierte en un momento crucial para fortalecer la identidad cultural a través de la comida. Las comunidades del Chocó se esfuerzan por transmitir sus conocimientos a las nuevas generaciones, organizando eventos culinarios y talleres que fomentan el orgullo por sus raíces.
En conclusión, la comida tradicional navideña en el departamento del Chocó no solo es un festín para el paladar, sino también un testamento de la rica diversidad cultural que caracteriza a esta región colombiana. A pesar de los desafíos, las comunidades afro e indígenas perseveran en su lucha por preservar y compartir las delicias que hacen de la Navidad chocoana una experiencia única y llena de significado.