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El Hatico, la tierra de Luis Enrique Martínez, un territorio de música, cultura y paz

A este corregimiento ubicado en Fonseca, al sur de La Guajira, se le conoce por ser la tierra que vio nacer a Luis Enrique Martínez Argote, el “Pollo Vallenato”, una leyenda de la música de acordeón.
Luis Ipuana y Karen Pedroza

El Hatico es un corregimiento encallado entre montañas que parece sacado de un cuento. Muchos lo consideran como ‘macondiano’ por ser un pueblito mágico lleno de riqueza cultural.

Está solamente a 1.800 metros del casco urbano del municipio de Fonseca, ‘La Tierra de Cantores’ de La Guajira. Su historia, es relativamente nueva, ya que, según datos de algunos docentes nativos del territorio, los primeros pobladores llegaron en 1878.

Para llegar hasta allí, simplemente se toma un ‘motocarro’ de los que se encuentran en cada esquina de Fonseca por un valor de 3.000 mil pesos, aproximadamente. Antes de encontrarse con el destino, se pueden observar cultivos de algodón y arroz, propios de la región, que hacen contraste con el azul intenso del cielo y el amarillo del sol, dibujando un hermoso paisaje.  

Ya estando en El Hatico encontramos la calle principal y casas de lado y lado, algunas todavía de bahareque y barro; también el Centro Educativo Agroambiental José Pérez, la única institución del corregimiento que recibió su nombre gracias a la labor de un maestro empírico quien, sin ser docente, enseñaba a los más pequeños a leer y escribir sin esperar remuneración a cambio.

El Hatico, La Guajira: historia del pueblo de Luis Enrique Martínez

Fueron algunas familias dedicadas al campo que llegaron y poblaron este rincón de La Guajira, quienes procedían del ‘Hato de la Huerta’, una finca de propiedad de los Parodi, y se dedicaban inicialmente al cultivo de caña y a la ganadería. De allí surgió su nombre ‘El Hatico’. Esas mismas personas dejaron un legado importante para que este sitio sea ahora el corregimiento más grande del municipio.

El Hatico es un pueblito pequeño y acogedor, tiene ocho calles y cinco carreras, algunas de ellas continúan sin pavimentar. Al entrar ya al centro del corregimiento, este es parecido a muchos de La Guajira, tiene en su parque principal a un costado una pequeña tarima dispuesta para eventos y a pocos metros la iglesia.

Su gente, como en la mayoría de los pueblos guajiros, es espontánea, hospitalaria, alegre y parrandera. Bien lo dijo el recordado compositor y juglar Carlos Huertas en su canción ‘Así es Fonseca’ grabada por el maestro Alfredo Gutiérrez, que quien no recuerde a este municipio es porque no ha amanecido en El Hatico.  

El arroz como eje económico y cultural

A El Hatico se le conoce como la despensa agrícola del municipio de Fonseca; al ser el corregimiento más cercano del casco urbano, provee a sus habitantes de varios alimentos, pero especialmente de arroz.  

El docente oriundo de El Hatico, Teddy Pérez Argote, cuenta que entre los años 50 y 60 comenzaron a sembrarse los primeros cultivos de arroz en este corregimiento, alimento que con el tiempo se convirtió en la principal actividad agrícola de sus pobladores. 

El Hatico, La Guajira: historia del pueblo de Luis Enrique Martínez

Actualmente, hay sembradas alrededor de 700 hectáreas de este cultivo, el sustento de al menos 5 mil personas. 

Pero los hatiqueros han hecho del arroz algo más que una fuente económica, este cereal se ha convertido también en parte fundamental de su cultura, pues el 21 de julio de 1983 se creó el Festival de Arroceros que, hasta la fecha, sigue haciéndose anualmente en ese mismo mes. 

“En el Festival se degustan más de 80 platos diferentes de arroz, se hacen desfiles alusivos a este cultivo, concursos como el látigo (hacer sonar este elemento con el que se espantan los pájaros que se comen el cultivo); carrera atlética cargando bultos de arroz; el del comilón de arroz, entre otros”, relató Pérez Argote. 

Para estas fechas, visitar el corregimiento y disfrutar de sus fiestas se convierte en el mejor plan para propios y visitantes que llegan hasta su plaza y las principales calles a participar de todas las actividades programadas y a degustar toda clase de arroz. 

Territorio musical y cultural

El Hatico es conocido por ser la tierra natal de Luis Enrique Martínez Argote el “Pollo vallenato”, el máximo exponente del acordeón, considerado el rector de los acordeoneros y precursor de los aires del vallenato tradicional. 

El Hatico, La Guajira: historia del pueblo de Luis Enrique Martínez

Pero, además, cuenta con un gran potencial para la música y la cultura. Sus habitantes llevan en la sangre el vallenato y muchos se dedican a este arte, aunque no de manera comercial.  

Uno de ellos es el docente Carlos Díaz, acordeonero profesional oriundo de este corregimiento y sobrino del juglar Leandro Díaz, quien ha sido el mentor de muchos acordeoneros de La Guajira, algunos de ellos ya se han coronado reyes vallenatos en el Festival de la Leyenda Vallenata y otros festivales de la región. 

El ‘profe’ Carlos, como es conocido en el pueblo, junto a la Fundación Luis Enrique Martínez, emprendió en El Hatico una escuela de música vallenata tradicional para aprovechar los talentos de niños y jóvenes que, de otra manera, no pudieran acceder a este tipo de formación. Asegura que la música es la mejor herramienta para la paz.

Una de las principales apuestas turísticas y culturales de El Hatico es la Casa Memoria Histórica y Patrimonial Luis Enrique Martínez, ubicada en este corregimiento y creada por la misma fundación. Se trata del sitio donde el “Pollo vallenato” vivió su niñez y adolescencia y que ahora recibe a visitantes de todo el país, quienes pueden encontrar su discografía, fotografías inéditas, elementos personales, y lo más valioso, disfrutar de su legado en el pueblo que lo vio nacer.  

El Hatico, La Guajira: historia del pueblo de Luis Enrique Martínez

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