Este territorio más allá de su historia dentro del conflicto armado se puede reconocer también como el territorio de los diálogos, los acuerdos y la reconciliación. Pero también es un municipio bañado en agua gracias a sus ríos, cascadas y lugares turísticos por explorar.
Conozca los sitios que puede visitar durante la Semana Santa y los 365 días del año en el municipio del baile del Yariseño, la ganadería, su gente amable y su diversidad natural, San Vicente del Caguán.
Y es que San Vicente ofrece a los turistas locales, regionales y nacionales la oportunidad de disfrutar de la naturaleza, la aventura, la selva y las sábanas del Yarí. Todo en un solo lugar.
Reserva Agroturística Refugio del Guara
A través del turismo de naturaleza este lugar ofrece a visitantes y amantes de la aventura, la oportunidad de disfrutar este rincón verde que protege los refugios de especies silvestres en peligro de extinción, tal como lo comenta la operadora turística Wendy Medina, integrante de la familia que apuesta al turismo desde la producción agropecuaria.
Allí encontrará actividades como la ruta del chocolate: un recorrido por los cultivos del cacao, su proceso de siembra y producción hasta convertirse en chocolate de mesa, el cual podrán degustar y conocer los beneficios del cacao. Podrá tener un acercamiento con los animales del refugio: el Guara, ovejas, gallinas y toda la fauna silvestre presente en un lugar único en la región. Además, podrá gozar de actividades como senderismo, trekking, avistamiento de aves, probar el vino de cacao, actividades de pesca, entre otras actividades para desarrollar.
Lo mejor será cuando realice el recorrido por la vía del Guara y el camino al Oasis del Amor, conducen a las cascadas Charco Azul y cascada Balcones, lugares donde el sonido del agua. Este refugio está ubicado a 16 kilómetros del casco urbano de San Vicente del Caguán; un viaje en camioneta y luego una caminata corta para llegar a un lugar íntimo con la naturaleza.
San Venancio
Con una cascada de 35 metros y la oportunidad de ver la fauna y flora de la región, este sitio turístico ubicado a 17 kilómetros del casco urbano por la vía Balsillas ofrece la oportunidad de pasar de la rutina de la ciudad a la calma del bosque y la música del agua que cae por el cañón de San Venancio.
Dentro de su recorrido se puede hacer senderismo para conocer toda la fauna y flora del lugar. Cuenta con piscinas y represa natural, alojamiento no convencional y la oportunidad de tener una estancia tranquila dedicada a la convivencia con el mundo animal.
Reserva la Danta
Ubicada en la vereda La Consulta, a 16 kilómetros de San Vicente del Caguán por la vía Balsillas. Este lugar cuenta con actividades de senderismo, un recorrido por un camino que te lleva a las cascadas y Cañón del Gaona, su mayor atractivo. Formaciones rocosas que configuran una serie de toboganes naturales y un balcón para visibilizar el paisaje. Lagos para pesca, gastronomía y alojamiento no convencional. Ofrece al turista la experiencia de ordeño y recolección de alimentos que produce la tierra y los animales de la granja.
Reserva El Pescador
Este es el lugar ideal para sentir la conexión con naturaleza, recargar energías y el sitio ideal para reflexionar en esta Semana Santa. Allí se podrá contemplar grandes paredes en roca con una altura de hasta 70 metros, un recorrido único que permite contemplar la naturaleza en su máxima expresión haciendo que se enamore de la manigua.
En una travesía por las mágicas aguas del Cañón del Azufrada y la quebrada El Pescador dos afluentes que se encuentran entre sí deleitando a su visitantes con la energía de sus aguas, su clima fresco y el paisaje lleno de fauna y flora. En el recorrido podrá encontrar diferentes especies de animales que acompañaran y cuidarán durante el recorrido.
La Reserva El Pescador está ubicada a 37 kilómetros de San Vicente del Caguán, un viaje de una hora por la vía que conduce al Huila por Balsillas.
Estas y muchas actividades encontrará en San Vicente del Caguán, la segunda economía más importante del departamento de Caquetá. Cuenta con aeropuerto, transporte terrestre y fluvial. Un comercio abierto durante toda la semana, mercado campesino, gente amable, campesina y resiliente.