En la región del Catatumbo, específicamente en el corregimiento de Honduras, en Convención, Norte de Santander, fue liberado el ganadero y empresario Heriberto Urbina Lacouture, quien había sido secuestrado por hombres armados en el municipio de Curumaní, centro del Cesar.
El hombre, de 86 años, fue entregado la tarde del martes a una comisión humanitaria liderada por la Defensoría del Pueblo y apoyada por la iglesia católica, quienes mediaron con el grupo armado que lo tenía secuestrado para su entrega. Así lo manifestó el Defensor del Pueblo, Carlos Camargo. “Saludamos con complacencia el regreso a la libertad del señor Urbina y el hecho de que pueda retornar al seno de su hogar, sano y salvo”.
El secretario de Gobierno del departamento del Cesar, Eduardo Esquivel, manifestó que la entrega a la comisión humanitaria ocurrió en la parte alta del Catatumbo y ya estaba en el seno de su hogar, al tiempo que dijo que la Gobernación del Cesar había ofrecido una recompensa de hasta 50 millones de pesos para los ciudadanos que dieran información sobre este secuestro.
“La entrega fue en la parte alta de la región del Catatumbo, en el sitio conocido como La bogotana en el corregimiento de Honduras; celebramos su liberación y ahora es traído al municipio de Chiriguaná, al seno de su hogar con el acompañamiento de la Décima Brigada Blindad del Ejército Nacional y de la Policía Nacional”, dijo el secretario de Gobierno Departamental
Recordamos que su secuestro ocurrió el lunes 24 de abril cuando el ganadero Heriberto Urbina Lacouture llegaba en su vehículo, conducido por su chofer, a una estación de servicios del municipio de Curumaní, en el centro del departamento del Cesar. Allí fue interceptado por cuatro hombres armados que lo obligaron a subirse a una camioneta la cuál apareció incinerada días después.
Esta había sido la tercera vez que el ganadero y empresario era víctima de secuestro, en los años 80 había sido retenido por grupos al margen de la ley.
Una vez se conoció el secuestro, ganaderos de la región realizaron varias movilizaciones para exigir su pronta liberación. La última fue el pasado sábado tres de junio, cuando se llevó a cabo una caravana desde Valledupar hasta el municipio de Chiriguaná, para reclamar una vez más el derecho a la vida.