Acceso a pensión, un escenario complejo para los artistas independientes
Dadas las dinámicas laborales en las que participan los artistas, los trabajos, que son pagos por noches, por horas, con distintas agrupaciones u organizaciones y la poca legalidad, su pensión es un tema lejano y esto hace que el acceso a un bono pensional sea casi una utopía dentro del panorama económico que enfrentan quienes viven del arte en Colombia.
Nos dimos a la tarea de hablar con algunos agentes del sector para que explicaran de primera mano qué posibilidades y perspectivas se contemplan en la actualidad para lograr una pensión digna en el gremio artístico, las respuestas nos pueden dar un mejor panorama y dejan muchas inquietudes.
No es un tema nuevo
Néstor Dueñas Torres es ingeniero de sonido y musicólogo, dentro de su trabajo académico ha estudiado algunos antecedentes de esta discusión que, según relata, viene desde la colonia cuando se dio el caso de lo que podría ser la primera huelga en este territorio, protagonizada por músicos en 1586. Los artistas se quejaron del supuesto abuso laboral por parte del entonces maestro de capilla Gutierre Fernández de Hidalgo, tal vez el compositor más importante en Suramérica en ese momento.
Sin embargo, el antecedente más estructurado y parecido a la consecución de una pensión digna es el caso casi desconocido de la Mutualidad Artística, colectivo formalizado en 1932 por algunos músicos de la Banda Nacional de Bogotá y algunos otros que tenían como profesión la música. Esta Mutualidad fomentó el ahorro de los músicos y, por sus principios de mutualismo, ayudaba a los familiares del asociado con un auxilio funerario en caso de fallecimiento de éste.
La Mutualidad cambió de nombre a la efímera Cooperativa de Músicos de Bogotá que, con algunos cambios estructurales y adición de miembros, se convirtió en SAYCO. Algunas personas como José Rozo Contreras, Francisco Cristancho, Gabriel Uribe y J.J. Dueñas fueron parte, tanto de la Cooperativa como de SAYCO.
¿Qué pasa en la actualidad?
La agremiación Músicos Sindicalizados de Colombia ( Mussico) ha hecho parte de la iniciativa que busca una ley para fomentar la financiación del sector, también llamada Ley del Músico, su secretario jurídico es el músico y abogado Ricardo Pedraza, que nos explica que “la gestión del músico independiente es muy precaria, ellos están en el Sisbén o en el régimen de las modificaciones de la Ley 100 y la Ley 50 cuando trabajan por noche o por horas, y solo hacen aportes a la seguridad social cuando los vinculan por contrato en algún proyecto esporádico”.
Néstor Dueñas también hace parte de Mussico y hace un recuento de las iniciativas que hay en la actualidad, como el programa de Beneficios Económicos Periódicos BEPS, del Ministerio de Cultura y Colpensiones, que procura un retiro digno a quienes se han dedicado a las artes tanto como gestores culturales y artistas que, por la precariedad laboral de la profesión no alcanzan a devengar un salario mínimo.
Los músicos que estén inscritos en estas cuentas BEPS y tengan la edad para pensionarse podrán recibir un porcentaje de un salario mínimo hasta su fallecimiento. Al igual que la Mutualidad de 1932, estos BEPS también fomentan el ahorro en los gestores y creadores, pues en caso de no tener la edad para pensión, podrán recibir un incentivo periódico para sus aportes voluntarios y hasta un seguro de vida si cumplen ciertos requisitos.
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Las asociaciones de gestión colectiva también son una alternativa a la pensión, al recaudar regalías por difusión pública en caso de que se sea compositor y/o intérprete. Sin embargo, hay que tomar en cuenta que es necesario estar asociado a ellas, como en el caso de la Sociedad de Autores y Compositores de Colombia, Sayco, que ofrece un programa de bienestar social con auxilios y reconocimientos para sus asociados.
En la práctica
Al ser independientes, muchos músicos colombianos cotizan de manera irregular, principalmente cuando se hace necesario por temas de contratación.
La cantautora quindiana Victoria Sur lleva más de 30 años en el oficio y considera que en su gremio hay mucho desconocimiento acerca de un tema tan importante como las pensiones: “Personalmente, no conozco ninguna ley que ampare a los artistas en el tema pensional, tampoco creo que haya mucha información al respecto, ni que los artistas se planteen estas preguntas, porque como creadores trabajamos de manera independiente y no tenemos un tema estructurado alrededor de la seguridad pensional. Yo pago mi seguridad social como independiente porque es un tema obligatorio, además soy madre de dos hijos y es mi responsabilidad ofrecer un futuro estable”.
Juan Felipe Arango, gerente General de Merlín Producciones y Manager de Puerto Candelaria, afirma que es muy difícil alcanzar una pensión si se cotiza de manera tan intermitente como lo hacen los músicos, por eso recurrieron a la creación de empresa: “nosotros como Merlín Producciones logramos crear una empresa para resolver muchas cosas musicales, artísticas, técnicas, y legales como esta; así podemos tener un salario, salud, pensión, ARL y demás, aunque tenemos más posibilidades de pensionarnos, no tenemos una seguridad, porque llevamos poco tiempo con esta formalidad”.
La tarea
Todas las personas entrevistadas coinciden en que hay que poner esta discusión en común en más escenarios. Si bien se han dado algunos pasos en dicha dirección, aún no se han dado resultados satisfactorios.
Ricardo Pedraza no es muy optimista respecto a la Ley del Músico y manifiesta que “en la actualidad no hay iniciativas para el gremio musical, algunas intentaron gestionar proyectos de ley, pero los resultados han sido desafortunados. Se supone que el ministerio de cultura es el espacio adecuado para intervenir en este tema, pero entre el proyecto de música, los congresos y lo que se ha venido edificando en favor, se ha prestado más para perorata y gestión política ajena a la gestión en beneficio de los músicos”.
Por su parte, Juan Felipe Arango considera que tener estas conversaciones y lograr que todos puedan cotizar al sistema de pensiones no solo beneficiaría al artista en cuestión, sino que sería beneficioso para la sociedad en general: “creo que hay mucha gente que desconoce del tema de pensiones, deberíamos hablar más de esto porque aquí se trata de dos cosas: protegernos en la vejez, poder alimentarnos, estar bien al final de la vida y proteger a los más viejos; la idea es que eso que nosotros aportamos le pueda ayudar a los de más edad cuando terminen su ciclo de vida laboral. Hace mucha falta información, debería haber más incentivos para que la gente se interese y alinearnos en buscar un bien común, en poder seguir construyendo y buscar el modelo que pueda funcionar para todo el mundo en el futuro”.
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Finalmente, Victoria Sur reflexiona sobre la importancia de reconocer socialmente la labor de los artistas para buscar como sociedad una vida de mayor bienestar para ellos: “Es curioso que siendo una artista independiente, mi futuro dependa de una ley que me ampare. Hay que reflexionar sobre eso porque nosotros, los artistas independientes, ofrecemos un servicio intangible, un servicio espiritual, emocional. Sobre esto es importante recordar que nosotros, en la pandemia por Covid-19, fuimos un soporte emocional y de contención en un momento tan oscuro para la humanidad”.
