El regreso de forma presencial a las aulas es un hecho y el Ministerio de Educación ha reforzado su trabajo de preparación y alistamiento con las secretarías de educación para garantizar que los protocolos de bioseguridad se implementen. Adecuaciones en las instalaciones, capacitaciones, guías y manuales han integrado el paquete de medidas con las que la comunidad educativa retornará en medio de este pico de contagios de Covid-19.
En Contacto Directo, Constanza Alarcón, viceministra de Educación, explicó que desde junio del 2020 se vienen implementando las adecuaciones y los preparativos para esta realidad, para lo cual se han invertido cerca de 1,2 billones de pesos en infraestructura, mejoramientos, guías, entre otras herramientas, que facilitarán la implementación de los protocolos de bioseguridad impartidos por el Ministerio de Salud.
“Junto a esta adecuación se ha adelantado un Plan Nacional de Vacunación que ha priorizado a los miembros de la comunidad educativa para que fueran de los primeros en recibir el biológico y hemos acompañado a las secretarías de educación en la preparación a los rectores, padres de familia y maestros para que adelanten el plan de mejora en cada una de las sedes educativas y estas tengan el alistamiento al 100 %”, indicó.
En manos de los rectores de cada institución educativa está la vigilancia en el cumplimiento detenido de los protocolos de cuidado, que incluyen el uso constante del tapabocas, el lavado de manos y el distanciamiento social. De presentarse algún inconveniente en la aplicación de las normas dadas por el ministerio, las secretarías de educación serán las entidades encargadas de hacer las revisiones necesarias y acompañar los ajustes en las instalaciones educativas.
“La vigilancia y el control debe darse en un ejercicio de comunicación directa entre rectores y secretarías de educación, puesto que el servicio educativo no se limita a las aulas sino también a los servicios de alimentación, de transporte, deporte, entre otros. Es muy diversa la forma del servicio educativo, por eso cada secretario debe tener control en la oferta que se brinda”.
La viceministra recordó que la educación es un derecho fundamental que debe ser garantizado por el Estado y que la consideración de exigir el esquema de vacunación es una responsabilidad que trasciende la individualidad. Aunque la vacuna contra el Covid-19 no es obligatoria (ni lo será) para que los menores accedan a los servicios educativos, Alarcón hizo un llamado a los padres a cumplir con la aplicación de los biológicos y a que los maestros tengan su respectivo refuerzo para brindar mayor protección en los colegios y mitigar el impacto de las nuevas variantes del virus.
“Sabemos que hay decisiones personales, credos religiosos, condiciones de salud, entre otros que han hecho que las familias no se apliquen vacunas. Sin embargo, debe haber un llamado a la responsabilidad y una presión social ya que la aplicación de la vacuna es un asunto de cuidado colectivo”, puntualizó.
En caso de que un padre de familia identifique fallas en los procedimientos implementados por parte de las instituciones educativas, pueden elevar las quejas ante la respectiva secretaría de educación o través del correo electrónico de la viceministra calarcon@mineducacion.gov.co, la viceministra afirmó que quiere estar al frente del cumplimiento de los protocolos y el exitoso retorno a las aulas.
Alarcón envió un mensaje de tranquilidad a los padres e hizo un llamado a los maestros para que de forma conjunta se logre un retorno a las aulas de forma armónica y efectiva buscando el mínimo de contagios.
“A los padres hay que darles tres ideas fundamentales: primero, se ha trabajado con responsabilidad para preparar las condiciones y recibir a los niños, no hay nada improvisado. Segundo, hay voluntad de parte de los maestros y de la comunidad educativa que han reportado mayor satisfacción al tener a los menores en las aulas y sabemos de sus buenos resultados. Por último, todo está dispuesto para avanzar en la vacunación y darles a conocer cuál es el dispositivo para que a nivel local la vacunación avance a niveles conjuntos”, dijo al pedirle a los maestros que acompañen este proceso de forma presencial con el refuerzo de sus vacunas aplicadas y voluntad para el retorno.}
"Nos jugamos el bienestar de una generación completa y por eso los maestros son fundamentales en este proceso", finalizó.
¿Y qué hago con la ansiedad de mi hijo ante el regreso al colegio?
Puede que su hijo cuente los días y hasta las horas para volver al colegio, como puede que, por el contrario, le manifieste su temor por regresar. Sea cual sea la situación los padres deben acompañar a sus hijos de forma armónica y tranquila para que esta transición los llene de herramientas emocionales útiles y disfruten del regreso “a la normalidad”.
María Isabel Guerrero Silva, psicóloga infantil y de adolescentes, especialista en atención clínica comportamental cognoscitiva de bebés, niños y adolescentes, dijo que como padres no es recomendable adoptar una posición radical acerca del retorno al colegio, lo que si debe hacerse es conocer cómo eran ellos antes del confinamiento y buscar acompañarlos en esta situación.
“Lo más importante es saber quién y cómo es mi hijo y ver cómo poder acompañarlo en esta situación. Hay que desarrollar habilidades de enfrentamiento, las cuales son un paquete de efectividad ante los nuevos retos en la vida. Aquí los padres pueden evaluar estas capacidades y no generar expectativas muy altas o bajas, y tampoco forzar las situaciones, es decir, si el niño no quiere ir al colegio no es que lo obligue a las malas, por el contrario, es decirles que es una realidad y que si algo malo ocurre mamá o papá estarán ahí para apoyarlos”, explicó.
Guerrero recomendó que, ante la gran capacidad de aprendizaje de los mejores, los padres están en la obligación de hacerles ver la importancia de mantener bien puesto el tapabocas, del lavado de manos y de vivir el día a día para no desgastarse; “es estar más en el presente para ver cuál es la situación real de cada uno de los niños”, afirmó la experta.
Tenga en cuenta que si durante más de dos semanas su hijo presenta alteraciones en el sueño o en sus hábitos alimenticios (que coma mucho o no coma), que se coma las uñas, que se haga pipí en la cama o que llore constantemente, es necesario acudir a ayuda profesional que puede encontrar a través de orientación psicológica en el colegio o por medio de un profesional de la salud.
“Antes del regreso al colegio se deben generar cronogramas y calendarios visuales para prepararse ante el día del retorno y una vez este se dé, observe los comportamientos de los niños y abra espacios de diálogo para reflexionar acerca de los pequeños y grandes cambios en sus vidas. Hay que darles una semana de adaptación; no deje de enviar al niño al segundo día porque el primero no le gustó. Si no duerme, no come, o tiene manifestaciones ansiosas por más de dos semanas busque ayuda. Hay que entender que cada uno tiene una habilidad de afrontamiento diferente y a partir de esta hay que acompañarlos”, puntualizó.
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