En Puntos de Vista hablamos sobre las zonas de reserva campesina
Las zonas de reserva campesina son áreas geográficas que se crean para fomentar la economía campesina y donde se tienen en cuenta características ambientales, agroecológicas y socioeconómicas regionales que permitan superar las causas de los conflictos por la tierra que afecten a esas comunidades. Su principal objetivo es crear condiciones de justicia social en las áreas donde se delimiten. De acuerdo con el Ministerio de Agricultura, estas zonas permiten evitar la concentración de la tierra, aprovechar tierras baldías y facilitar la política de desarrollo rural, entre otras.
Actualmente, Colombia cuenta con 14 de estas zonas, de las cuales siete han sido aprobadas durante el actual Gobierno de Gustavo Petro. A través de la Agencia Nacional de Tierras (ANT), han sido incluidas más de 440.000 hectáreas en los últimos meses. Las más recientes se encuentran en Tuluá (Valle del Cauca), Venecia Parte Alta (Cundinamarca) y Togüí (Boyacá).
Este es un avance histórico para el reconocimiento de las territorialidades campesinas en el país, pues se encontraba en mora por los tímidos esfuerzos de los gobiernos anteriores, aun cuando se trata de una vieja figura reconocida por la ley. Además, en las bases del Plan Nacional de Desarrollo 2022-2026, “Colombia: Potencia Mundial de la Vida”, el derecho humano a la alimentación constituye uno de sus ejes de transformación, y el campesinado se define como uno de los actores diferenciales para el cambio. Igualmente, en el primer punto de los Acuerdos para la finalización del conflicto con las antiguas FARC, sobre la Reforma Rural Integral, las zonas de reserva campesina juegan un papel central para la “transformación estructural del campo”.
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Hace más de diez años, algunos habitantes del área rural de Togüí, Boyacá, plantearon la posibilidad de gestionar su territorio a través de concretar la propiedad de sus predios, la producción agraria sostenible, el cuidado de los recursos naturales, el trabajo colaborativo y la incidencia en el desarrollo del municipio. Esto lo hicieron en rechazo a la minería que amenazaba con desplazarlos de su territorio.
Por esta razón, en noviembre de 2023, el Consejo Directivo de la Agencia Nacional de Tierras, aprobó la constitución y delimitación de la Zona de Reserva Campesina Paraíso Escondido, ubicada en el departamento de Boyacá, que cuenta con cerca de 6.950 hectáreas en las veredas Carare, Garibay y Hatillo, y que beneficia a cerca de 400 familias.
Entre los principales objetivos estipulados en la Ley 160 de 1994, respecto a las Zonas de Reserva Campesina, se encuentran: fomentar la economía campesina, controlar la expansión inadecuada de la frontera agropecuaria del país, regular la ocupación y el aprovechamiento de las tierras baldías, dando preferencia a su adjudicación a los campesinos o colonos de escasos recursos, y en general, crear las condiciones para la adecuada consolidación y desarrollo sostenible de la económica campesina.
