En el inicio de su agenda en Davos, Suiza, el presidente Gustavo Petro participó del panel ‘Buscando un equilibrio para la Amazonia’, en el marco del Foro Económico Mundial.
El mandatario reiteró la postura de su gobierno frente a las economías de combustibles fósiles, asegurando que deben ser sustituidas por economías de energías renovables, o de lo contrario el cambio climático llegará a “un punto de no retorno”.
De igual forma, señaló sobre la importancia de cuidar la selva amazónica, “la cual sirve como esponja para la chimenea de CO2 que viene desde América del norte”.
“La selva está en riesgo”
Petro aseguró que en todo el planeta hay economías que van en contra de la selva. “En el caso colombiano es la ganadería extensiva, la idea de la gran propiedad del suelo, de la tierra, como criterio de riqueza, y detrás un narcotráfico que ahora va hacia el sur por la aparición del fentanilo en Estados Unidos”.
Además, el jefe de Estado aseguró que la selva ahora se enfrenta a otros peligros, como el de las mafias multinacionales.
Durante su intervención, el presidente fue enfático en asegurar que “la selva es el producto de un tenue equilibrio planetario”, que si llegara a desaparecer se entraría en “un punto irreversible para la existencia humana”.
“La selva amazónica no es estratégica, la palabra es vital, para la especie humana (…) la acción que se está proponiendo hasta este momento para cuidarla es insustancial, fuera del esfuerzo indígena”, indicó Petro.
¿Qué se propone Colombia?
De acuerdo con el presidente, solamente en Colombia se necesitan 2.500 millones de dólares año para lograr revitalizar el espacio ya deforestado, y para generar la construcción de una bioeconomía, que, en palabras de él, significa una “economía con la selva, y no contra la selva”.
Al termino de la intervención, Petro señaló que Colombia no propone “una cooperación, sino un mecanismo que permita cambiar la deuda por acción climática y que el mismo país pueda producir los recursos que se necesitan para salvar la selva.
“Eso que significa: reformar el sistema financiero mundial. Es un mecanismo poderoso de financiamiento de la acción climática que, a escala universal, implica un cambio del sistema financiero mundial. Si esto se hace en todo la cuenca amazónica, tendríamos un mecanismo poderoso de corto plazo para revitalizar la selva amazónica en beneficio de toda la humanidad”, finalizó el presidente.