En el Resguardo Indígena de San Francisco, zona rural del municipio de Toribío, en el nororiente del departamento de Cauca, las autoridades indígenas del pueblo Nasa entregaron a una comisión liderada por Defensoría del Pueblo, Personería y administración municipal de la citada localidad a 16 integrantes del Ejército Nacional, adscritos al Comando Específico del Cauca, que estaban en poder de habitantes de la vereda La Pila desde la madrugada de este martes 12 de abril.
Retención, que de acuerdo con Eduín Mauricio Capaz, consejero mayor del Consejo Regional Indígena del Cauca (CRIC), se generó a causa de lo que calificó como una extralimitación de la fuerza pública al llegar a la jurisdicción.
“Los hechos describen que esta unidad militar de alguna forma incursionó de manera violenta en una vivienda familiar, hirió a un integrante de sus comunidades con el pretexto de buscar un positivo, que estas unidades militares se encontraban en la zona, sin embargo, el cotejo de identidad demuestra que no es la persona a la cual las autoridades militares estarían buscando y se trataría de un comunero que no tiene ningún nivel de búsqueda por la justicia ordinaria”, afirmó el dirigente indígena.
Luego de la entrega de los militares, que contó con el acompañamiento de la Misión de Apoyo al Proceso de Paz en Colombia de la Organización de Estados Americanos (MAAP/OEA), fueron evacuados de la zona. El indígena herido se recupera en una clínica de Cali.
El Ejército Nacional a través de un comunicado rechazó lo sucedido e indicó que las operaciones militares son legítimas y coadyuvan a generar condiciones de seguridad y de garantía del goce de los derechos de la población civil. Finalmente instó a la comunidad “a no obstruir las operaciones militares, ya que esto puede constituir delitos, como los consagrados en los artículos 429 y 469 del Código Penal Colombiano”.