La Asociación Campesina del Catatumbo (Ascamcat) creó esta figura en el año 2013, en el marco del paro que se adelantó ese año. Siendo pionera en el país, vienen jugando un papel importante en el desarrollo de la subregión de Catatumbo, en Norte de Santander.
A través de encuentros en distintos municipios, se han articulado para fortalecerse, tener sus reglamentos internos y que no actúe fuera de su funcionalidad, que se basa en la defensa de derechos humanos, seguridad, la defensa de la vida y los territorios.
En la última integración, realizada en el municipio de Teorama, se logró también un intercambio de conocimientos con las guardias indígenas.
Según Evelio Torres, coordinador de las guardias campesinas: “las guardias funcionan como está conformada la asociación, tenemos enmarcadas tres zonas; la zona alta, que comprende Ocaña, El Carmen y Convención; luego está la zona media, conformada por Hacarí, Abrego, la Playa, San Calixto, Teorama y El Tarra; y la zona baja, integrada por Tibú, El Zulia, Sardinata y Cúcuta, así como algunas veredas en la parte de frontera con Venezuela. Cada una tiene su propio coordinador y yo vendría siendo quien lidera la totalidad de las guardias”.
Y para poder ser miembro, debe tenerse claro algunos aspectos, porque la figura surge de un movimiento social que hace presencia en la región, por lo que quienes deseen pertenecer a la misma, asegura Torres, deben ser parte de la asociación.
La consigna de este proceso es que cada integrante debe estar afiliado a una Junta de Acción Comunal, este es el primer paso para poder ingresar a la asociación y posteriormente decidir si hacer parte de la guardia campesina.
Así como se dividen en varias zonas, para lograr abarcar todo el territorio, tienen símbolos que los representan. Esto cuenta Teodomiro Vargas: “nosotros nos identificamos como guardias de Ascamcat, con el chaleco azul y los logos de la asociación y de Marcha Patriótica, así como el logo que como campesinos nos representa, que es el bolillo patriótico, la machetilla y el azadón”.
De igual forma, explicó en qué consiste la figura del bolillo: “lleva los tres colores de la bandera, lo acompaña la machetilla y unos cordones, que llevan cuatro nudos muy significativos, representan los cuatro mártires que fueron asesinados en el marco del paro del 2013. Hay otro nudo que simboliza la muerte de un compañero de la guardia asesinado durante las erradicaciones forzosas que realizaba la fuerza pública, pero también lo acompaña el pito que sirve de alarma para cualquier advertencia, una linterna para alumbrar y utilizamos un radio para comunicarnos entre coordinadores”.
Con los años como guardias campesinas han logrado adquirir respeto y reconocimiento a nivel local y nacional, mencionando Evelio Torres, que los soldados y policías del territorio los ven como aquellos que pueden ayudar en temas de seguridad, sin que ellos estén, de noche y de día, o cuando hay necesidad.
“Hemos acompañado varias actividades con las instituciones del Gobierno, incluso cuando el presidente Petro ha venido a Cúcuta o al Catatumbo, hemos estado coordinando con la seguridad que él trae y las cosas nos han salido bien. Entonces ya entendieron que nosotros no estamos para contrarrestar las acciones de ellos, sino para garantizar los derechos de cada quien, porque tratamos de defender la comunidad y también de los actores en armas porque son personas y cada quien merece que se le respete, entonces hoy si vemos que hay un reconocimiento”, aseguró Evelio.
Según Junior Maldonado, directivo de Ascamcat, se seguirá haciendo acompañando en temas de derechos humanos “pero también se continuará capacitando en temas de primero auxilios, al igual que en atención en emergencias, riesgos y desastres buscando ser certificados a través de la unidad de gestión del riesgo”.
Así mismo Maldonado aseguró que se están fortaleciendo para ayudar a la Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas de Catatumbo, por medio del proyecto de fondo de Naciones Unidas. Dice: “la guardia maneja una iniciativa denominada guardianes de la búsqueda para ubicar puntos de interés forense donde pudieron quedar personas en fosas comunes en medio del conflicto, todo este proceso se está documentando”.
Se espera que en los próximos días se entregue un resultado de más de 50 casos de personas desaparecidas que quedaron en medio del conflicto, al igual que la recuperación de cerca de 15 cuerpos en unas veredas del municipio de Tibú.
En este territorio, la guardia está haciendo todo un proceso de acompañamiento a través de esas figuras que han denominado los guardianes de la búsqueda, fortaleciendo ese rol humanitario que es el que prima en este proceso el cual espera ser reconocido oficialmente por el Gobierno nacional.