Las lluvias continúan con intensidad en esta región del país. La última emergencia se registró en el municipio de Puerto Wilches, allí el desbordamiento de las aguas de la ciénaga Yarirí afectaron al menos 300 familias de zona urbana.
El afluente alcanzó el metro de altura e inundó el mismo número de viviendas, generando el daño de parte de sus enseres.
Según el alcalde Jairo Toquica, las viviendas se construyeron sobre una zona de riesgo de inundación.
“Se trata de viviendas ubicadas en zonas inundables por la ciénaga, gente que construyó su casa allí porque no tenían otro lugar, pero significa un riesgo para ellos”.
De acuerdo a las autoridades, adultos mayores y niños ya fueron atendidos por una brigada de salud, mientras se espera que el nivel del agua baje para revisar el impacto real del desbordamiento.
Entre tanto, Puerto Wilches continua en máxima alerta por estar rodeado de fuentes hídricas que alcanzaron su máximo nivel por el intenso invierno.
Precisó el mandatario que “tenemos el riesgo latente del caudal del río Magdalena. Por otro lado, está el río Sogamoso que con la apertura de compuertas ya nos reportaron inundaciones en cultivos y finalmente el río Lebrija que desemboca en caños y ciénagas de nuestro territorio”.
Recordaron el llamado al Gobierno Nacional la importancia de la reparación de un dique que protege a más de 30 mil habitantes del área urbana de las aguas del río Magdalena, pues temen que con las precipitaciones se repitan las inundaciones sufridas hace 10 años en Puerto Wilches.