Las 175 familias del Bajo Calima en Buenaventura, Valle del Cauca, permanecen confinados desde el pasado 15 de enero ante los enfrentamientos entre el Eln, el Clan del Golfo y las disidencias de las Farc, que se disputan el control territorial de la zona.
Un líder del territorio, que por seguridad este medio reserva su nombre, hace un llamado urgente a las autoridades, mencionando que “la comunidad está atemorizada desde el sábado pasado por los enfrentamientos en el bajo de las colonias entre el Eln y grupos gaitanistas. Hoy hubo presencia de los ellos en el pueblo, atemorizando la comunidad. Pedimos a la fuerza pública tome el control y garantice la tranquilidad y permanencia de la comunidad para que no se desplace hacia Buenaventura, que la situación allá también está difícil”.
Entre tanto, el delegado de la personería para derechos humanos, Luis Bernat Fernández, se unió al llamado de las comunidades para que el gobierno nacional se apersone de esta situación y, a su vez, indicó que “se recibió información este martes sobre una persona muerta, derivado de los enfrentamientos de las autodefensas gaitanistas (…) esta persona continua ahí en el sitio y no ha sido posible que entren las autoridades a hacer el levantamiento, ya que hay barreras para hacer este ejercicio”.
Por otra parte, las autoridades de Buenaventura y el comandante de Infantería de Marina No 2, coronel Wisner Paz Palomeque, anunció que se están realizando operaciones aéreas y fluviales con la presencia de más de 100 uniformados, para garantizar el orden público a la zona y así permitir el ingreso de ayudas humanitarias y de los organismos del Estado para atender a la población.
Cabe resaltar que la ONU alertó sobre la difícil situación que atraviesa esta comunidad que, desde hace tres meses, cuando se iniciaron los enfrentamientos entre estos grupos ilegales, vulneran los derechos humanos a través de intimidaciones violentas, confinamientos y desplazamientos forzados.