Para contarle a Colombia las maravillas de un municipio próspero y pujante, nace en el departamento del Huila la emisora de paz, que estará ubicada en Algeciras, población que ha sentido con vehemencia los rigores de la violencia y que hoy, gracias a los avances del proceso de paz y el tesón de su gente, empieza a consolidarse nuevamente como la gran “despensa agrícola y ganadera del departamento”.
Algeciras está localizada geográficamente en el centro del departamento, entre la cordillera Oriental y un ramal de ésta, colindando en gran parte de su extensión con el departamento del Caquetá, con el que mantiene una estrecha relación en lo comercial, social y cultural.
Su nombre inicial fue San Juanito, pero en el año 1937 fue cambiado por Algeciras en honor a la población andaluza (España), bajo el argumento de los entonces gobernantes de que el nombre de San Juanito “no era serio para representar a un municipio próspero”.
Son cerca de 25 mil habitantes asentados en 672 kilómetros cuadrados, la mayoría ubicados en la zona rural, en pequeñas fincas donde se cultiva principalmente café, caña panelera, cacao, hortalizas y frutas.
Algeciras es hoy el valle que inspira grandeza por sus raíces indígenas y campesinas, por sus montañas verdes que huelen a café y por el tesón de su gente que, a punta de trabajo, demuestra cada día la importancia que tiene este municipio para el departamento y el país.
Los algecireños se identifican con el folclor típico de la región, el Sanjuanero y el Bambuco Tradicional. Cada año se celebran las fiestas en el mes de junio, con verbenas populares y encuentros culturales que se enriquecen con la gastronomía de la zona: el asado huilense, los tamales, el bizcocho de achira, el insulso y la mistela.
La Algeciras de hoy es otra: el estigma de una zona de alta injerencia de grupos armados empieza a desaparecer, terminando con esa imagen negativa que por años afectó a sus pobladores.
Las bolsas rellenas de arena que por décadas sirvieron de barricada para proteger de los ataques al puesto de policía y la Alcaldía ya no existen y la gente empieza a reconstruir sus casas, las que, por efectos de la violencia y el miedo, se encontraban en ruinas y abandonadas.
Así se empieza a retornar la tranquilidad, y para contar estas bellas historias de vida y el quehacer diario de la gente emprendedora y solidaria, nace la Emisora de Paz que los algecireños podrán sintonizar, a partir del próximo 21 de mayo, en los 92.6 FM.
La nueva estación radial contará con un destacado equipo de cinco profesionales y técnicos, que bajo la tutoría y los lineamientos de la Radio Pública, trabajará en la reconstrucción del tejido social, dándole voz y difusión a la comunidad, a los grupos étnicos, las organizaciones sociales y en general a todos aquellos que desde sus territorios están engrandeciendo el nombre de Algeciras, el Huila y Colombia.