El medio ambiente y los recicladores de oficio del Valle del Cauca tienen una nueva oportunidad a partir de los procesos de atención que lleva a cabo el Sena para cambiar su vida. Ellos son protagonistas de las economías populares para mejorar sostenibilidad ambiental en las ciudades.
La acción más reciente en esta línea beneficia a 40 recicladores de Cali, quienes por primera vez reciben formación en el programa Operario en Recuperación de residuos sólidos que adelanta en su sede principal del Centro de Nacional de Asistencia a la Industria, ASTIN.
Para el aprendiz Alberto Muñoz Alegría, “esta capacitación es muy positiva porque tecnifica el trabajo que hacemos para aprovechar los residuos reciclables y disminuir los problemas en los rellenos sanitarios. También es una valiosa oportunidad para romper con el paradigma de la estigmatización que algunas personas tienen hacia el reciclador”.
Los 40 recicladores aprendices del Operario están divididos en dos grupos; uno ubicado en la zona norte, donde se forman 20 integrantes de la Asociación de Recuperadores del Medio Ambiente (REMA) y, otro en el sur, que cobija a personas de la Asociación de Recicladores y Famibodegas del Sur (ASOBOSUR) y de la Fundación Ciclos Valle.
“La economía circular, enfocada en la reutilización de productos plásticos para transformarlos en nuevos materiales de distinto uso, es uno de los principales propósitos del Centro. En este caso particular, lo hacemos fortaleciendo la labor de los recicladores, para mejorar las condiciones de vida de sus familias e impactar el Ambiente”, explica Caroline Perea Cabal, subdirectora del ASTIN.
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Irene Ramírez, representante legal de la asociación REMA, sostiene que “pisar una institución tan prestigiosa como el Sena servirá para que crezcamos, cambiemos el chip y nos valoremos más como personas y por el oficio tan bonito que hacemos”.
Entre los objetivos de esta capacitación está el desarrollo de competencias para la clasificación, selección y separación de residuos según la normativa vigente en el país. Por ello, se hace la caracterización y el reconocimiento de distintos tipos de plásticos, papeles, metales y cartón.
Esta capacitación ha sido una oportunidad para esta población , incluso para aquellos que tienen alguna discapacidad. Es el caso Aminta Cecilia Chasqui, que desde su silla de ruedas sostiene que “en lo que llevamos de este curso ya reconozco mejor los materiales del reciclaje e incluso he hablado con algunos dueños de casa para mejorar la disposición de residuos en la fuente”.
“La idea es que lleguemos a mejorar los ingresos por esta labor”, agrega doña Aminta, quien lleva 20 años en el oficio, junto con su hijo y esposo. Ella adaptó una motocicleta para que, a pesar de las nuevas limitaciones de movilidad, siga haciendo los recorridos diarios.
Cali tiene al menos 1.200 recicladores de oficio, quienes desde 2019 reciben atención del Sena Regional Valle con cursos complementarios y certificación de competencias laborales, que además cuentan con el apoyo de la Alcaldía de Cali, la Fundación Grupo Familia y La Fundación Carvajal.
El programa de Operario del ASTIN inició en febrero de 2025 y durará nueve meses.