El gobierno español nombró el martes un embajador en Venezuela, tras dos años sin representante diplomático de ese nivel debido a tensiones diplomáticas bilaterales con el gobierno de Nicolás Maduro.
"Se designa embajador de España en la República Bolivariana de Venezuela a D. Ramón Santos Martínez", anunció el gobierno del socialista Pedro Sánchez en un comunicado al término del Consejo de Ministros.
Madrid no reconocía la legitimidad del gobierno de Maduro desde las elecciones legislativas de diciembre de 2020, y se unió a medio centenar de países para apoyar como líder al opositor Juan Guaidó, que en 2019 se autoproclamó presidente interino invocando su condición de líder del Parlamento.
Fue a fines de diciembre de 2020 cuando el gobierno español decidió poner término a la labor de su embajador en Caracas de la época, Jesús Silva, sin nombrar un sucesor.
Este último había sido acusado por Caracas de facilitar el exilio a España del opositor político venezolano Leopoldo López.
El nuevo embajador nombrado el martes, Ramón Santos Martínez, ocupaba desde noviembre de 2021 el puesto de encargado de Negocios en Venezuela, la más alta representación diplomática en el país desde que quedó vacante el cargo de embajador.
Santos Martínez también fue embajador de España en Panamá (2015-2019) y en Bolivia (2008-2012), y estuvo destinado en las embajadas de España en Washington, Bruselas-UE y Quito.
La exembajadora de la Unión Europea (UE) en Venezuela, la portuguesa Isabel Brilhante Pedrosa, dejó el país en marzo de 2021 tras ser declarada "persona non grata" por el gobierno.
En el caso de España, la reanudación en noviembre de 2022 de las negociaciones entre gobierno y oposición venezolanos, bajo los auspicios de México y Colombia, fue celebrada como un "paso muy importante" hacia la reconciliación y abrió paso al nombramiento de un embajador.
"El Gobierno de España celebra la reanudación del proceso de negociación en México entre el gobierno y la oposición venezolana", afirmó entonces el ministerio de Asuntos Exteriores en un comunicado.
De este modo, se da "un paso muy importante en la reconciliación del país", añadió el ministerio, que puso su "capacidad de interlocución al servicio de las partes" para contribuir a "crear las condiciones necesarias para que las negociaciones sean exitosas".