“No he faltado a mi palabra ni a la constitución”: Gustavo Petro a la Corte Suprema de Justicia
Durante su visita a Lisboa, Portugal, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, respondió a las declaraciones de la Corte Suprema de Justicia, que instó a la sensatez y al respeto tras las afirmaciones del mandatario en las que se proclamaba como jefe de Estado y, por lo tanto, del fiscal general, Francisco Barbosa.
A través de su cuenta de Twitter, el presidente Petro aseguró que en ningún momento ha incumplido la Constitución Política, ya que el artículo 115 de la Carta Magna establece que el presidente de la República elegido por mandato popular es el jefe de Estado, el jefe de Gobierno y la máxima autoridad administrativa.
El presidente reiteró que, como jefe de Estado, representa a la nación ante el mundo y ante el pueblo. Asimismo, volvió a preguntar sobre el presunto encubrimiento que habría hecho el fiscal Daniel Hernández en relación con homicidios que iban a ser cometidos por las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC), más conocidos como el Clan del Golfo, según una denuncia presentada por el portal web La Nueva Prensa.
Petro también señaló que uno de los presuntos asesinos de lesa humanidad estaba relacionado con la financiación de una campaña presidencial y cuestionó la cercanía y amistad entre el jefe de la institución investigadora y el jefe del Estado de ese entonces.
Ante la falta de respuestas a sus preguntas, el presidente Petro afirmó que si la Fiscalía no cumple con sus funciones, se deben activar los mecanismos que la Constitución y el derecho internacional le confieren para garantizar la justicia.
En un comunicado, el presidente de la Corte Suprema de Justicia, Fernando Castillo Cadena, recordó que el fiscal general de la Nación no tiene un superior jerárquico y que su función está regulada por el orden jurídico y enmarcada en la autonomía e independencia de la Rama Judicial. Además, destacó que la administración de justicia tiene la función de proteger los derechos, libertades y garantías de la población, y está sujeta a estrictos controles de legalidad en sus actuaciones.
