En la vereda Puerto Bello, a cuatro kilómetros del casco urbano del municipio de Piamonte, en la región conocida como la Bota Caucana, suroriente de este departamento y límites con Caquetá y Putumayo, fue inaugurada una planta para la transformación de frutos de la Amazonía colombiana, entre ellos el que crece en la canangucha, una especie de palmera considerada por las comunidades de la región como ‘árbol de vida’.
Una tarea que ha contado con el esfuerzo y entrega de Maydany Salcedo, líderesa social, defensora de Derechos Humanos y representante legal de la Asociación Municipal Campesina de Trabajadoras y Trabajadores de Piamonte, Cauca (Asimtracampic), organización que lidera el proyecto.
Feliz, emocionada y con ese tono de voz que contagia optimismo y esperanza, doña Maydany cuenta que, junto a la canangucha o moriche, como también lo conocen en los Llanos Orientales, con sus compañeros de asociación se plantearon elaborar a partir de la deliciosa piña amazónica bebidas gasificadas, compotas, deshidratados y néctares “como conquista y esfuerzo de la comunidad campesina”, para la construcción de la paz territorial.
“Esto es resultado de una lucha que iniciamos en el 2013 cuando nos constituimos como organización (…) Hemos luchado y trabajado por defender nuestros derechos por demostrar que podemos transformar nuestros productos amazónicos y darles valor agregado”, afirma la lideresa, enfatizando que mientras logran su comercialización, “así sea en un canasto saldré a ofrecer nuestros productos a la comunidad para que los vayan conociendo”.
Hoy, la planta de producción genera siete empleos directos, en su mayoría madres cabeza de familia, y más de 30 empleos indirectos. Y en todo su andamiaje se integra la labor diaria en 28, 7 hectáreas de cultivo de piña, arreglos agroforestales en 7,5 hectáreas y prácticas limpias en 21 hectáreas.
Es de anotar que, en esa misión de consolidar la planta de transformación y producción, los campesinos de Piamonte han contado con el apoyo del Instituto Amazónico de Investigaciones Científicas - Sinchi, Institución creada por la Ley 99 de 1993 dedicada a la investigación científica en temas ambientales y vinculada al Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible.
Además, para la consolidación de su sueño han recibido también apoyo y acompañamiento del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
Satisfecha de la labor cumplida y lista para los retos que se vienen, doña Maydany resalta que, como organización campesina sindical, con clase y principios agrarios continuará ejerciendo la defensa de los derechos de sus paisanos labriegos, la protección del territorio Andino Amazónico y la construcción de una paz estable y duradera en su región.
Y aunque a la fecha ya tienen una línea de productos para ofrecer en la región y el país a la que se integran piña amazónica para pizzas en rodajas, en conservas, canangucha deshidratada, los néctares y compotas, dice que desde ya están pensando en otras ideas como una bebida gasificada natural con hierbabuena, anís y otras plantas aromáticas propias de esta zona del suroriente colombiano, porque “esto significa progreso, esto es una inmensa alegría, es una alegría de todos, de los campesinos que buscamos que esta región se fortalezca, además cuidando el medio ambiente (…) todo no puede ser guerra, todo no puede ser sufrimiento”, finalizó Maydany.