Pianos de Radio Nacional: esenciales para el desarrollo musical de la emisora
En las instalaciones de la Radio Nacional de Colombia aún se conservan tres de los pianos que han acompañado la historia de la emisora desde sus primeros años. Hoy queremos compartir algunas imágenes y documentos que ilustran las funciones que cumplieron esos memorables instrumentos y cómo ello ilustra también el tipo de relaciones que tuvo la emisora con el entorno musical colombiano.
Muy pronto, desde su fundación, la Radio Nacional se convirtió en un foco para la actividad musical de Bogotá y sus estudios se sumaron al escaso número de auditorios con que contaba la ciudad. Músicos radicados en el país y aquellos que lo visitaban en gira de conciertos actuaron en los estudios de la emisora. El pago de artistas fue el referente principal de la Radio Nacional en esta relación de pagos del Ministerio de Educación:
Pagos del Ministerio de Educación, 1943-03-31
Dentro de aquel grupo de “artistas” se encontraba la influyente pianista Lucía Pérez (1900-1974) quien ese mismo año 1943 asumió la dirección del Conservatorio de la Universidad Nacional. Lucía Pérez fue maestra de los más importantes pianistas colombianos de la segunda mitad del siglo XX y su impronta fue decisiva en el desarrollo de la pedagogía del piano en nuestro país. Allí estuvo vinculada hasta su muerte.
Recibo de pago a la pianista Lucía Pérez, 1943-04-15
Gabriel Vieco Ortiz (1888-1958) prestó servicios como afinador de pianos. Además, interpretaba el violín, fue luthier de órganos, violines y pianos e hizo parte de una familia de nueve hermanos, tres mujeres y seis hombres todos músicos, labor en la que los acompañó su padre Camilo Vieco Arrubla (1853-1918), ebanista y acuarelista. Juntos tuvieron por negocio la fabricación de rollos de pianola. El miembro más reconocido de la familia fue el compositor Carlos Vieco Ortíz (1904-1979).
Recibo de pago a Gabriel Vieco por afinación de piano, 1943-11-22
En la siguiente imagen se encuentra la mencionada Lucía Pérez como integrante del conjunto de cámara que tuvo la Radio Nacional en 1944. La acompañan otros dos importantes músicos colombianos. En el violín, Wolfano Alejandro Tobar García, recordado como Alex Tobar (1907-1975) compositor de la canción “Pachito Eché''. Cuando se vinculó a la Radio Nacional en 1942, Tobar había regresado de Argentina, epicentro continental de la música popular grabada, donde fue integrante de la activa orquesta de Efraín Orozco. Antes, durante los años veinte había estudiado en Escuela de Altos Estudios Musicales de Bonn, Alemania luego de formarse en el violín con Guillermo Uribe Holguín.
Por el otro lado, se encuentra Miguel Uribe, miembro de una notable familia musical de Medellín que incluye a su hermano, el flautista Gabriel Uribe y su sobrina (hija de Gabriel) la pianista Blanca Uribe. El padre de Miguel y Gabriel también fue músico (violinista y director) además de médico y participante de la Guerra de los Mil días. Sus hermanos, Samuel Uribe Uribe, compositor, y Daniel Uribe, guitarrista y cantante, hicieron parte de la estudiantina dirigida por Emilio Murillo que viajó a Nueva York en 1910 para realizar algunas de las primeras grabaciones hechas por músicos colombianos. Volviendo a Gabriel Uribe, durante el resto de década estuvo en vínculo con la emisora como parte del conjunto de cámara y del Cuarteto de la Radio Nacional. De este hicieron parte además Alejandro Tobar y Pedro Julio Román en los violines y Gerhard Rothstein en la viola, quien fue uno de los miembros fundadores de la Radio Nacional en 1940.
Posteriormente, en los años cincuenta, Gabriel Uribe se ubicó en Estados Unidos, como chelista en de la Orquesta Filarmónica de Kansas.
Conjunto de cámara de la Radio Nacional, 1944-07-20
La siguiente imagen, publicada en el Boletín de Programas de diciembre de 1949, reune de nuevo a Tobar y a Uribe, esta vez junto al pianista Jaime León (1921-2015) quien fue, precisamente, uno de los estudiantes de Lucía Pérez en el Conservatorio de la Universidad Nacional. Allí se graduó León como pianista en 1937 y luego se fue a EE.UU para ingresar a la Escuela de música de Juilliard, donde continuó su formación en el teclado y sumó la dirección de orquesta y la composición. Diez años más tarde, regresó a Colombia para ser director de la Orquesta Sinfónica Nacional y vincularse al Conservatorio como profesor de piano. Su quehacer musical es entonces otra muestra de los vínculos de dichas instituciones con la Radio Nacional, como protagonistas en los años cuarenta del entorno musical bogotano en su faceta académica. No duró mucho León en estas labores. Esta foto fue publicada poco antes de su regreso a EE.UU para vincularse con la industria del teatro musical.
Conjunto de cámara de la Radio Nacional, 1949-12
Además de los músicos nacionales, los estudios de la Radio Nacional de Colombia, y su piano, fueron medios para la actividad de músicos extranjeros de paso por la capital en gira de conciertos. Estos casos están representados en la siguiente imagen por el tenor austriaco Richard Tauber, muy famoso para el momento de esta presentación en la Radio Nacional con 56 años, pocos meses antes de morir en enero de 1948. Tauber fue un prodigio, recordado anecdóticamente por su impresionante velocidad para memorizar papeles de óperas. Fausto, de la ópera homónima (Gounod), en 48 horas; Baco, de la ópera Ariadna en Naxos (R. Strauss) en una noche; Calaf, de la ópera Turandot (Puccini) en tres días. Tauber sumó cien apariciones en escena y más de setecientas grabaciones para los sellos Odeón y Parlophone.
Es interesante destacar su relación con el compositor de opereta Franz Lehár (1870-1948), que vino después de que Tauber se había consagrado como tenor operístico en los años veinte. Esto significó ciertas críticas del sector snob pero lo cierto es que el cantante fue capaz de desarrollar una carrera cosmopolita acorde con el desarrollo de la industria musical del temprano siglo XX. Por ello no encontró frontera entre la ópera, la opereta o el cine. En su programación, la Radio Nacional tampoco fue agena a dichas tendencias y, para los cuarenta, bien fueron importantes los espacios para ópera como aquellos dedicados a la música brillante, motor de la industria discográfica.
De manera recíproca, Tauber no fue extraño a la radio. Al estallar la Segunda Guerra Mundial, permaneció en Inglaterra a donde había migrado por su ascendencia judía. Dada la casi nula actividad de los teatros, Tauber subsistió grabando y participando en transmisiones radiales. Tras la guerra, el tenor tomó riesgosa parte en una adaptación al estilo Broadway de la opereta La tierra de las sonrisas (Lehar) a cuyo fracaso se debe la gira de seis meses que emprendió por Suramérica para solventar algo de la tremenda deuda y, consecuentemente, el recital en los estudios de la Radio Nacional. En el periplo lo acompañaron los pianistas Arpad Sandor y George Schick, pero ninguno de los dos parece ser el de la foto.
Richard Tauber (tenor, Austria) - Radio Nacional 1947-02-01
Durante el periodo en que Arturo Abella fue director de la Radio Nacional (1951-1953), se estimuló la presencia de músicos en los estudios y las agrupaciones propias de la emisora. Una de ellas fue la orquesta. Aquí la tenemos, infortunadamente cortada en la digitalización, sin saber quién sería su pianista, pero con el instrumento protagonista.
Orquesta de la Radio Nacional, 1953-03
Por esos mismos años cincuenta, rondaba en los estudios el músico con quien más se ha relacionado la historia de los pianos de la Radio Nacional en los últimos años: Oriol Rangel (1916-1977). Aquí aparece con su conjunto de música popular colombiana como parte estructural de la programación. No fue música popular lo único que tocó Rangel en la emisora, como tampoco el único pianista. Pero a su presencia en la emisora dedicaremos un próximo escrito.
Conjunto de Oriol Rangel, 1954-04
