Según José Eloy Mena, coordinador de gestión del riesgo, actualmente "el municipio de Bojayá está atravesando una crisis en lo que respecta a los organismos de socorro". Sus argumentos son los siguientes:
Bojayá es un municipio habitado por más de 13 mil personas, distribuidas en 53 comunidades afrodescendientes e indígenas. Estas comunidades están dispersas de tal manera que llegar a la más lejana (Nuevo Olivo) requiere hasta dos días de navegación, lo que dificulta aún más la tarea de atender una emergencia.
La falta de voluntad de las comunidades ha impedido la creación de un cuerpo de bomberos. "Nos ha tocado trabajar con menores de edad, lo cual no ha permitido nuestra inscripción en la Dirección Nacional de Bomberos", afirma Mena.
Otra razón expuesta por el coordinador es "la falta de voluntad de los alcaldes de las dos administraciones anteriores, quienes apoyaron de forma insuficiente la capacitación y la adquisición de equipos".
El comandante del Cuerpo de Bomberos Voluntarios, Kevin Mena, coincide con las razones por las cuales Bojayá no cuenta con un organismo de socorro adecuadamente constituido. Además, agrega: "En su momento, el organismo se creó con menores de edad, algunos de los cuales ya han alcanzado la mayoría de edad y desearían formar parte nuevamente, pero no se dan las condiciones necesarias".
Según los informes de las autoridades, solo en Bellavista, la cabecera municipal, se han producido seis incendios en los últimos dos años, ocasionando grandes pérdidas materiales y poniendo de manifiesto la falta de preparación de los organismos de socorro.
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El comandante también se refiere a las actuales condiciones y las proyecciones para superar la situación. Afirma: "En estos momentos, estamos inactivos porque no tenemos la estructura física, maquinaria y personal necesarios".
El comandante ha solicitado apoyo para viajar a capacitaciones, recibir equipos y herramientas de trabajo, los cuales ha tenido que costear por su cuenta. En ocasiones, no ha podido asistir debido a la falta de recursos económicos.
Ante este panorama, surgen interrogantes y preocupaciones. "Actualmente, en Bojayá no contamos con una manguera para apagar un incendio y no sabríamos qué hacer en caso de que se presente", concluye.
La situación se vuelve aún más preocupante debido al aumento de los incendios en el norte del departamento de Chocó. Según informes de la Oficina de Gestión del Riesgo, se han registrado seis incendios en el municipio de Riosucio entre 2022 y lo que va del 2023.
El 26 de mayo de este año, en Vigía del Fuerte, un incendio arrasó con cinco viviendas y afectó a otras siete mientras los residentes intentaban sofocar las llamas. Afortunadamente, solo se produjeron pérdidas materiales.
Las autoridades están preocupadas por las situaciones mencionadas anteriormente, por lo que actualmente se están llevando a cabo en Bojayá jornadas de sensibilización y convocatorias para establecer organismos de socorro capaces de responder a las emergencias del municipio.