Empoderamiento femenino en la gestión comunitaria del agua en Villavicencio
El liderazgo de Adriana Baquero, por el que hoy es referente de la lucha comunitaria del agua, principalmente en Villavicencio, lo heredó de su padre quien también fue líder social. Y desde hace más de diez años ha colaborado en el desarrollo de los acueductos comunitarios, proceso que inició en el acueducto de su barrio y que luego la llevó a recorrer otros territorios del Meta y del país.
“Los acueductos comunitarios nacieron del proceso autogestionado de comunidades que por sí mismas se organizaron y trabajaron para poder llevar agua a cada uno de sus hogares, cuando en su momento el Estado no les brindó la atención oportuna”, indicó Adriana.
De hecho, desde sus inicios, los acueductos comunitarios han tenido que enfrentarse a las leyes, esto porque como toda la labor ha sido propia, no cuentan con los recursos necesarios para tener acceso a una planta de tratamiento, ni obtener las debidas licencias para operar. Por esto, Adriana explicó lo siguiente:
“La Ley de servicios públicos desconoce el tema comunitario y tiende a privatizar y a mercantilizar el agua, y nosotros no la vemos como una mercancía sino como un derecho fundamental. Luego con quienes nos perseguían se inició una tarea conjunta”.
Por ello, la labor de Adriana como presidenta de la Asociación de Acueductos Comunitarios en Red ‘Acer Agua Viva’, se ha centrado en denunciar aquellos actos que atenten contra las fuentes hídricas, y capacitar, acompañar y fortalecer a los líderes y lideresas de los diferentes acueductos comunitarios, dentro y fuera de la ciudad.
También, realiza ‘Las Escuelas del Agua’, una estrategia con la que vincula a los niños y jóvenes de los barrios que tienen acueducto propio, para que desde los más pequeños fluya el amor por el tejido social y se cree ese sentido de pertenencia por proteger y preservar el agua.
“Los llevamos a recorrer el territorio y hacemos monitoreo, eso nos ha permitido identificar fauna y flora en los sectores de las bocatomas de la comuna 8, que nos han servido para manifestarle a la Corporación Autónoma Regional Cormacarena lo importante que es esta cuenca y de ampliar las zonas de proyección de la recarga hídrica en el municipio”, puntualizó.
Como resultado de estas labores y una acción mancomunada con otros líderes, se logró en el 2021 que Villavicencio fuera la tercera ciudad de Colombia en contar con una Política Pública para los acueductos, de la cual, se espera que por un periodo de 12 años fortalezca el trabajo de los líderes y lideresas de los más de 100 que operan en este municipio.
Además, previamente por medio de una ordenanza departamental, el 14 de septiembre fue declarado como el ‘Día de la gestión comunitaria del agua’, lo que hace que cada año se dirija la mirada hacia las comunidades que han llevado esta lucha y se les reconozca todo el ejercicio que han hecho por preservar sus acueductos.
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Cabe agregar que, por más de diez años la capital del Meta atraviesa una problemática en el acueducto principal, la cual ha empeorado con cada temporada de lluvias en la que deja sin este servicio a media ciudad, razón por la que, han sido sumamente importantes los acueductos comunitarios; que, de alguna manera han prevenido un colapso o una crisis sanitaria en todo el municipio.
